Michael Sweetney
Michael Sweetney
Michael Sweetney y Brian Craig
Michael Sweetney
Michael Sweetney y Shaquille Johnson
Michael Sweetney
Michael Sweetney
Albert Jackson y Michael Sweetney

Básquetbol > EL JUGADOR EN LLAMAS

El nuevo Michael Sweetney

Bajó 40 kilos con una cirugía, está más agil y volvió para darle un salto de calidad a Urunday Universitario
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20 de enero de 2017 a las 05:00
Michael Sweetney volvió por cuarta vez a disputar la Liga Uruguaya de Básquetbol. Y su presencia nunca pasa inadvertida. Por su pasado en la NBA, por su historia de vida y por su imponente tamaño.

En noviembre de 2015 llegó para jugar en Urunday Universitario luego de estar dos años alejado de las canchas.

Pesaba 166 kilos, pero su talento le permitió al equipo evitar el descenso, eliminar a Larre Borges en el playoff reclasificatorio y alcanzar los cuartos de final donde cayeron 3-2 ante Trouville.

"Ahora, a golpe de vista, cualquiera se da cuenta que su físico cambió bastante", contó el base del estudioso Leandro Taboada.

"Nos había mandado una foto, pero cuando llegó a Montevideo nos llevamos una gran sorpresa porque el cambio era mucho más grande en vivo que en la foto", comentó Álvaro Aguiar, preparador físico del equipo.

Sweetney, de 34 años, se sometió a una cirugía conocida como cinturón gástrico con la que logró bajar 40 kilos.

"Él se sintió muy a gusto la temporada pasada y para esta etapa del torneo teníamos pensado volver a contar con él. Si bien estábamos muy conformes con Andrew Feeley ya era una decisión tomada con la cual esperamos dar un salto de calidad", dijo a Referí Nelson Silva, integrante de la comisión de básquetbol de Urunday Universitario.

"En base a lo que charlé con especialistas sobre la cirugía, a la información que nos brindó Mike y sobre lo que ya estaba haciendo en Estados Unidos fue que armamos el trabajo físico para volver a ponerlo en cancha", dijo Aguiar.

El base Mauro Zubiaurre dijo en la interna del verde que jugar con Sweetney, un pívot de 2,03 m, es "como tener un base en la llave".

"Es un gran jugador de básquetbol, conoce los secretos del juego y es mucho más que un rebotero. Si bien puede ser goleador también sabe hacer que los demás anoten", explicó Silva.

"Como persona es muy tranquilo a diferencia de otros estadounidenses que juegan en el país", agregó.

"Es muy reservado, tiene solo comunicación con el otro estadounidense (Shaquille Johnson) pero sí es muy abierto cuando le hablan o le preguntan algo", expresó Taboada.

Johnson dijo a Referí la temporada pasada: "Aprendo mucho de él y ya lo conocía de la NBA. Cuando él fue drafteado yo tenía 13 años", dice.

Sweetney fue la primera elección de New York Knicks y elegido en el noveno lugar del histórico draft de 2003 donde el número 1 fue LeBron James, el 3 Carmelo Anthony, el 4 Chris Bosh y el 5 Dwyane Wade.

En su temporada de rookie (novato) sufrió la muerte de su padre y eso lo sumió en una profunda depresión tal como contó a Referí en febrero del año pasado: "Me dejó de importar el básquetbol, dejé de entrenar duro, estaba siempre triste y hasta pensé en suicidarme, en tomar pastillas. Estaba en una muy mala situación y nunca se lo dije a nadie, tenía miedo de hacerlo. Eso me hizo perder la carrera en la NBA, porque nunca traté el problema".

Después de jugar dos temporadas en los Knicks y dos en Chicago Bulls, tuvo que dejar la mejor liga del mundo de básquetbol para llevar su carrera a China, Puerto Rico, Venezuela, República Dominicana y Uruguay. En 2010-2011 jugó en Biguá, en 2013-2014 en Atenas y la temporada pasada lo hizo en Urunday Universitario.


En su nueva estancia en el estudioso debutó el viernes pasado ante Trouville y el lunes fue figura en el triunfo ante Larre Borges, en condición de visitante, con 21 puntos y 14 rebotes.

"Es un gran jugador pero con su cambio físico se ven pequeños cambios en su juego. Intenta cosas que antes no hacía, tiene movimientos más ágiles y transita más rápido la cancha. Además está muy motivado y esa motivación nos contagia", dijo Taboada.

El base le preguntó tras el triunfo ante Larre Borges cómo se sentía y Sweetney le dijo que mucho mejor con respecto al año pasado. "Me dijo que no siente tanto dolor en la espalda ni en las rodillas y que no sintió jugar cada 72 horas, cosa que el año pasado lo complicaba".

"Me enfoqué en el fortalecimiento de su estructura y en el desarrollo y mejora de los patrones de movimiento básicos y específicos del deporte. Todo el cuerpo técnico (encabezado por Héctor Da Prá) tenía claro que la calidad como deportista estaba intacta, la única duda era cómo iba a reaccionar en lo físico y, como era de esperara, reaccionó mucho mejor de lo pensado", concluyó Aguiar.

El nuevo Sweetney hace ilusionar a Urunday que lleva cinco partidos ganados en forma consecutiva y que alcanzó el segundo lugar de la tabla: "Veremos hasta dónde podemos llegar, ojalá que al Súper 4", concluyó Silva.

Las cifras

21-14
El lunes, ante Larre Borges anotó 21 puntos y bajó 14 rebotes. En su debut ante Larre Borges marcó seis y totalizó 13 capturas.

10,9
La temporada pasada jugó 14 partidos en Urunday Universitario promediando 10,9 en puntos y 12,7 en rebotes siendo figura en el equipo.

17,5
En Biguá promedió 17,5 en puntos y 9,3 en rebotes. En Atenas, con 155 kilos, sus promedios fueron de 14,5 y 9,7.

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