La extenista Arantxa Sánchez Vicario volvió a esta en el foco de las noticias en las últimas semanas por haberse sentado en el banquillo acusada de un presunto delito de alzamiento de bienes.
Durante su comparecencia en el juicio, la ganadora de cuatro Grand Slams y exnúmero uno del mundo destacó que estaba viviendo una situación económica complicada por culpa de suexmarido, Josep Santacana.
Sin embargo, el periodista Antoni Belchi, afincado en Miami, contó este martes a Espejo Público que Sánchez Vicario estaría cobrando entre 150 y 200 dólares por cada hora de clases de tenis.
El periodista, además, visitó el barrio, de clase media, donde los vecinos ni siquiera conocen quién es la extenista.
"Lleva una vida muy modesta, alejada de cualquier tipo de lujos, una vida muy normal. Está dando clases de tenis y trabaja en una escuela", destacó el reportero desde el bloque de pisos que la extenista adquirió junto a Santacana.
Respecto a su vivienda en Estados Unidos, Sánchez Vicario cuenta con 118 metros cuadrados, dos habitaciones y dos baños y, además, se incluye en una urbanización situada en el centro de la ciudad con seguridad privada durante 24 horas, piscina y gimnasio.
La casa fue alquilada por 3.250 dólares mensuales, aunque ahora el precio sería de 6.000 dólares al mes.
Sánchez Vicario alcanzó a mediados de septiembre un acuerdo con la Fiscalía y con la acusación particular del Banco de Luxemburgo para no ir a prisión y por el cual como máximo, será condenada a dos años por urdir un plan junto a su exmarido para evitar el pago de una deuda.
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