El entrenador argentino de la dupla uruguaya de remo compuesta por Bruno Cetraro y Felipe Klüver que clasificó a la final del doble par ligero el martes de noche, Osvaldo Burchi celebró de una manera muy especial el logro de sus dirigidos en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020.
Tal como lo había anunciado con anterioridad, a diferencia de la primera serie, en la que fue en una camioneta junto a los demás entrenadores de los rivales, esta vez iba a ver la carrera por televisión, como lo hizo en el repechaje, debido a que como él mismo contó, en la camioneta que los lleva hasta la meta, no puede ver bien el desempeño de los celestes debido a que lo tapaban los camarógrafos.
Sentado en un sillón frente a la TV, en el lugar reservado exclusivamente para técnicos, dirigentes y oficiales, luego de terminada la competencia, el entrenador dejó fluir la adrenalina contenida y explotó: "¡Puta madre! ¡Qué lo parió! ¡Qué bárbaro! ¡Qué bárbaro!", repetía entre saludos y una risa nerviosa.
Y luego de un abrazo de un allegado, volvió a decir: "¡Qué lo parió! ¡Imposible, imposible, imposible!".
Posteriormente, saludó y agradeció a todos quienes se habían acercado a felicitarlo, entre ellos, el presidente de la Federación Uruguaya de Remo, Fernando Ucha.
Mirá cómo fue el festejo íntimo del entrenador de los celestes:
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