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El equipo de la Policía antiterrorista francesa que sigue a sol y sombra a Uruguay: ya son cuatro Teros más
Son cuatro personas que siguen a sol y sombra al equipo. Muy reservados y de perfil bajo, aparecen antes que se mueva la delegación y vigilan todo el entorno, y al final son los últimos en irse. El equipo de seguridad que la organización del Mundial de Rugby le asignó a la delegación de Uruguay está compuesto por policías franceses formados en combate al terrorismo y al narcotráfico, que conviven en el mismo hotel y los siguen en todas sus tareas grupales.
“Tengo el placer de trabajar y de dirigir un equipo de cuatro personas de la policía especial de Francia, que lucha contra el terrorismo y el tráfico de drogas, contra personas muy peligrosas”, arranca el diálogo con El Observador Patrice Lori, jefe del equipo de seguridad. “La Copa del Mundo es un evento muy importante, estamos con el equipo pero atentos al entorno ante posibles amenazas de terrorismo. Y también de activistas ecológicos que pueden hacer acciones peligrosas, que muy rápidamente pueden utilizar el video, los teléfonos, la distribución en redes sociales, con acciones pequeñas pero que pueden generar un impacto muy grande”, agrega sobre el mayor objetivo de su equipo en este torneo.
Cada plantel que juega el Mundial tiene un grupo policial de élite asignado, que vigilan el entorno, incluida la prohibición de vuelo de drones alrededor de los lugares donde trabaja el equipo, ya sea por seguridad o para evitar espionaje deportivo, como ocurrió en el inicio del torneo, cuando una delegación reclamó ante World Rugby haber sido espiado por otro equipo, según informó The Telegraph sin especificar a los involucrados.
Pero además, la seguridad es un tema sensaible en Francia, donde en los últimos meses hubo varias protestas sociales que derivaron en serios desmanes, sobre todo en París. Por eso el giobierno francés puso mucho foco en la seguridad.
“Es un trabajo diferente del que tenemos todos los días. Es necesario vigilar todo lo que pasa alrededor del equipo de Uruguay desde la seguridad. Pero es muy dinámico y nos identificamos mucho con la filosofía del equipo, porque es muy próxima a las ideas que guían nuestro trabajo: el espíritu de grupo”, agrega el funcionario, durante un lapso libre de trabajo.
La entrevista con El Observador se da mientras el plantel está en su lugar exclusivo en el primer piso del Novotel de Avignon, y minutos después que los policías atravesaran un gran desafío desde la seguridad: vigilar el viaje en tren desde Lyon hasta Avignon, una de las circunstancias, junto al día de partido, en el que más cuidado deben tener, pero que transcurre sin mayores problemas. Para esa tarea se agregaron otros dos policías para tareas de apoyo, y lo mismo ocurre los días de partido, en los que trabajan en coordinación con la policía y la seguridad del estadio “Tenemos cuatro operadores de fuerzas especiales de policía trabajando cada día de la Copa del Mundo, pero los días de partido hay más amenazas. Hay muchos elementos que integrar en la tarea”, explica.
Otro día de mucho trabajo fue el sábado, cuando Los Teros tuvieron su única práctica abierta de la semana y más de 1.500 personas llegaron hasta el estadio de Avignon para verlos. El comando de seguridad controló el acceso a la cancha y luego la firma de autógrafos a los niños que llegaron a la práctica. Como todas las actividades de Uruguay, transcurrió con tranquilidad y sin eventos destacados desde la seguridad. Al menos visibles, porque ese es uno de los talentos del grupo de Policías: controlar todo sin que se note.
Pero más allá de su tarea, este mes en el que el equipo de seguridad lleva con el plantel ha permitido crear un lazo personal, que excede a la tarea, según Lori. “Es interesante que tenemos dos situaciones. Somos policías, pero a la vez somos un grupo muy humano. Nuestra tarea es poner al equipo en una situación fluida para que todo funcione fácil: en la calle, en las ciudades, de modo que el equipo piense únicamente en hacer su tarea, jugar y ganar partidos. Así lo hicieron en el partido ante Namibia, lo cual nos generó mucha alegría. Lo vivimos con ellos. Hemos tenido momentos especiales. Podemos hablar que en estos días nos hemos hecho una familia con ellos. Es una experiencia humana maravillosa”, agregó el jefe de seguridad, que tras la victoria fue invitado junto a su equipo a celebrar con Los Teros en el vestuario.
“Hay un valor que es muy fácil de apreciar en este equipo: es la humanidad. Son hombres muy humanos, además de grandes jugadores. Algunos dicen que es una pequeña nación, pero a mi me parece que es una nación muy grande desde el corazón y los valores humanos”, agrega el funcionario policial.
