El Zlatan del ciclismo

El ciclista eslovaco es la máxima estrella del ciclismo mundial y ayer dejó en claro también que ya es un histórico en el deporte del pedal, al ganar por tercera vez consecutiva el mundial de ruta disputado en Noruega.

De esa forma se convirtió en el primer corredor en ganar tres ediciones del Mundial de forma consecutiva, tras sus títulos en Richmond 2015 y Doha 2016, y el de ayer en la ciudad de Bergen.

Sagan se une así a los grandes campeones que suman tres oros en la prueba en línea de los mundiales, el italiano Alfredo Binda, los belgas Rik van Steenbergen y Eddy Merckx y el español Óscar Freire, pero el eslovaco con la particularidad de que los ha logrado todos seguidos, lo que hace única su hazaña.

Figura polémica

Con su histórico triunfo, el ciclista de 27 años, cierra bien arriba una temporada que venía siendo discreta tras ganar una sola etapa del pasado Tour de Francia, antes de que fuera expulsado de la carrera por empujar al británico Mark Cavendish en un esprint.

Tras su salida del Tour, admitió su responsabilidad y apeló la sanción al Tribunal Arbitral del Deporte, que no le dio cabida a su reclamo y mantuvo el castigo.

Sagan sumó así una nueva polémica a su historial, que en 2013 en el podio del Tour de Flandes, tuvo un escándalo al pellizcar la nalga de una modelo que entregaba los premios en el podio, lo que generó protestas y llevó al eslovaco a tener que pedir disculpas.

Pero su carrera, a la que aún le queda mucha tela, también tiene genialidades. En su niñez, Peter jugaba al fútbol y su hermano Juraj, con quien comparte equipo en Bora-Hansgrohe, era quien se dedicaba al ciclismo y ganaba.

De tanto ir a verlo, se contagió su gusto por la bicicleta y a los 6 años comenzó a pedalear. Dejó el karate, el skate y las clases de teatro a las que lo llevaba su madre. Empezó con el ciclocross, siguió con el mountain bike –prueba en la que sorpresivamente compitió en los pasados Juegos Olímpicos de Río de Janeiro– y finalmente se pasó a la bici "de rueda fina".

En Flandes 2013, el ciclista comenzó a llamar la atención con sus extraños festejos al llegar y ganar las etapas, algo que mantiene hasta el día de hoy y que lo caracteriza.

Luego, en 2014 y 2015 tuvo años complicados en el que por 30 veces quedó segundo al perder los embalajes finales, lo que hizo que varios lo llamaran segundón.

Pero en el Mundial de Richmond 2015 dio una exhibición para ganar su primera malla con el arcoíris, lo que repetiría el año pasado en Doha en un embalaje electrizante con varios rivales.

En las grandes vueltas tiene 12 triunfos de etapas, cuatro en la de España y ocho en el Tour, sin haber corrido nunca el Giro de Italia. Por sus características, embalador, sus aspiraciones son a quedarse con la malla verde de sprinter, algo que ha logrado en cinco ocasiones en el Tour, ya que en la montaña cede ante los que dominan ese terreno.

Ayer en Bergen volvió a mostrar que es el mejor del mundo al ganarle al local Alexander Kristoff en un final de photofinish.

Y también demostró su excentricidad: no quiso reconocer el circuito el día previo a la prueba porque iba a dar varias vueltas antes de la definición del título.

Así es Sagan, el campeón del mundo del ciclismo de ruta.

Los 10 mejores en la prueba de ruta del Mundial de Bergen:

1. Peter Sagan (SVK), los 267,5 km en 6 h 28:11.

(media: 42,738 km/h)

2. Alexander Kristoff (NORuega)

3. Michael Matthews (AUStralia)

4. Matteo Trentin (ITAlia)

5. Ben Swift (Gran bretaña)

6. Greg Van Avermaet (Bélgica)

7. Michael Albasini (SUIza)

8. Fernando Gaviria (COLolombia)

9. Alexey Lutsenko (KAZajistán)

10. Julian Alaphilippe (FRAncia)