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Del Pajarito al hijo del relator: los recambios del Maestro
Primero fue Fernando Muslera en la altura, donde la velocidad de la pelota es distinta. Después Nicolás Lodeiro en una cancha sintética destrozada. Luego "tiró" a la jaula de los leones a Josema Giménez contra el mejor Falcao de entonces. El último fue Federico "Pajarito" Valverde, al que casi ni se le conocía la voz y debutó en el duro Defensores del Chaco. Y ahora será el turno de Lucas Torreira.
A lo largo de su proceso, Oscar Tabárez no solo ha citado a jóvenes sino que luego ha sorprendido mandándolos a la cancha en instancias complejas y donde rindieron verdaderas pruebas de personalidad.
Claro que la decisión no es alocada. No se trata de mandar a un chiquilín a la jaula de los leones. Sino que analiza, observa y espera el momento adecuado. ¿Se toman riesgos? Claro. Pero se hace a consciencia de que el jugador está preparado y con el entorno ideal para rendir.
Lucas Torreira llegó a la selección. Y ahora deberá demostrar en la gira por China sus capacidades, que no pasan solo por lo futbolístico, para poder conformar el plantel que conformará Tabárez para el Mundial de Rusia 2018. Pero la historia comenzó hace unos cuanto años atrás.
¿Scotti? ¿Dónde está?
Acaso desde los primeros pasos el Maestro sorprendió convocando a un Andrés Scotti. El propio jugador admitió que tenía cerca de 30 años, jugaba en la fría Rusia y no esperaba una citación. De hecho, lo llamaron a las 3 de la mañana para avisarse que iba a la primera gira. Jugó en todos los puestos de la defensa.
Muslera al arco
Allá por 2009 la selección acarreaba una serie de dificultades en el arco. La era Carini llegaba a su fin. Los sucesores arrancaron bien pero las dudas invadieron. Primero Juan Castillo, luego Seba Viera. Hasta que el Maestro no dudó más y mandó al joven Fernando Muslera al arco. Para compleja si las había. Contra Ecuador en la altura de Quito y con la necesidad de ganar.
"Nosotros buscamos un golero para cubrir una época del arco de la selección y apuntamos a Muslera. Es joven y está en la edad de sumar experiencia. ¿Los errores? Son de todos los tiempos y pasan en todos los partidos, además hoy hacen los balones cada vez más complicados para los goleros", dijo Tabárez en aquel entonces.
Desparpajo a la cancha
Nicolás Lodeiro y Sebastián Coates llegaron juntos a la selección y su citación causó sorpresa. Es que fue previo al repechaje contra Costa Rica para clasificar al Mundial de Sudáfrica 2010.
Pero Tabárez pasó de una simple citación, que muchos pensaban era para que vivieran una eliminatoria por dentro, a mandar a Lodeiro a la cancha. El entonces volante de Nacional fue titular en una complicada cancha de césped sintético y jugó sin presiones.
Coates debutó en la mayor con el paso del tiempo. Tabárez lo venía siguiendo: "Es un jugador que estuvo acá desde la Sub 17 y que creció mucho. Con grandes valores personales, es una persona muy educada, muy adaptable al grupo, con gran personalidad. Pero no surgió como un valor que arrasó; en la sub 20 era suplente. En un partido contra Colombia que llovía a mares, entró, y para los que pensamos que iba a tener dificultades, nos demostró que nos equivocamos", declaró a la revista de la Conmebol de setiembre de 2011.
Josema, de Toledo al Mundial
Diego Lugano y Diego Godín suspendidos. En el horizonte Colombia. Puntos de oro en juego. Y el rearmado de la defensa era todo un tema. Fue cuando Tabárez hizo debutar al joven José María Giménez, que actuó con una personalidad asombrosa.
Para el recuerdo quedará que le pidió a Lugano su camiseta y que en pleno partido le preguntó al colombiano Falcao qué auto tenía. Aquella noche se recibió. La fecha, 10 de setiembre de 2013, se la dejó grabada en la piel en un tatuaje que se realizó.
Bruno Silva, el compinche de Luis
Bruno había salido de Danubio. Y su peregrinar por el fútbol lo llevó a Holanda. Allí se encontró con un Luis Suárez recién salido del cascarón. Y Bruno hizo de padre, consejero, chofer, compinche. Cierta vez el plantel tenía necesidades en el lateral y Tabárez contó como pensó en Silva. "Un día le pregunté a Suárez por Silva. Le dije, 'te voy a decir una cosa pero no se la cuentes a nadie. Hablame de Bruno Silva' y me habló maravillas. Y después al tiempo me enteré que no le había dicho ni una palabra a Bruno y eso que son amigos. Silva es un jugador con condiciones y con adhesión, que es lo primero que le pedimos a los futbolistas desde el comienzo".
Stuani, de goleador a volante
Más acá en el tiempo el Flaco Stuani fue otra de las sorpresas del entrenador de Uruguay cuando lo citó en pleno proceso eliminatorio para el Mundial de 2014.
Tabárez había manifestado que la presencia de Stuani no era sorpresa porque ya había debutado en 2008 en un amistoso con Sudáfrica. En nota con La Diaria el Maestro contó: "Una vez tuvimos una conversación, acá de pasada, con Diego Forlán y hablamos de él. Además de jugar muy bien al fútbol, Forlán respira información por todos lados. Lo que quiero decir es que Stuani estuvo, después no, y volvió para quedarse. Salió goleador en Uruguay, en España, sé lo que había hecho en Danubio, en Bella Vista, las características personales, cómo era su familia, un montón de cosas. ¿Pero sabe cómo apareció el hueco? (Javier) Aguirre, en su momento en Espanyol, lo puso de volante por la derecha. A mí me interesó, lo empecé a seguir y vi que cumplía con la función. Yo sabía que cuando se acercara al área no tenía que decirle nada, porque los goleadores basan generalmente todo su potencial en un don que tienen para eso".
Matías Vecino
Como ocurrió con otros jugadores, Tabárez se jugó con Matías Vecino. El mismo día que volvía Luis Suárez tras la histórica sanción que le impuso la FIFA, el técnico mandó al joven Vecino a la cancha. No fue un partido más. El rival era Brasil en Recife. Uruguay arrancó para comerse una goleada, pero lo empató de atrás. El debut de Vecino se produjo el 25 de marzo de 2016. No salió más. En silencio, se apoderó del puesto.
Federico Valverde
La última joya del proceso. Fue otro debut asombroso. Porque el técnico lo mandó a la cancha contra Paraguay en Asunción y con apenas 19 años. Pero el Maestro ya lo tenía visto: "Valverde, que es un gran jugador, lo valoramos. Era un chico pequeño, muy pequeño, y delgado. Lo recibimos a los 13 años en la selección, con una timidez patológica, no hablaba, no se comunicada, cuando quería hacerlo no le salía la voz, y ahora uno lo ve hablando suelto y es mérito de todos". Aquella noche en Asunción, Pajarito se recibió. Suárez lo felicitó y Cavani dijo "tiene mucho para darle a la selección". "Yo sabía que no le iban a temblar las piernas", agregó.
Los nuevos tiempos marcan que, a la brevedad y siempre y cuando el técnico lo confirme en la lista, se avecina el turno de Lucas Torreira.
Con 22 años le llegó su primera reserva. Deberá estar atento y preparado para el momento. Los antecedentes marcan claramente que a Tabárez no le tiembla el pulso a la hora de hacer debutar a los jóvenes cuando considera que están dadas las condiciones para mandarlos al ruedo.
