Un empate, dos sensaciones

El empate sin goles del partido clásico, que el domingo jugaron Peñarol y Nacional en Estadio Centenario ante 55.000 personas, dejó sensaciones diferentes para los equipos. En tanto los aurinegros sufrieron la igualdad, los albos disfrutaron el punto que rescataron.

Para Peñarol, por la forma en que llegó al partido, mejor integrado y con una racha ganadora y goleadora que intimidaba, el triunfo era el único resultado que le iba a conformar, en tanto para los albos, sin Gonzalo Bueno y Facundo Píriz, ambos lesionados, un empate iba a tener sabor a triunfo.

El partido, que fue dominado por Peñarol, no tuvo goles, aunque sí varias acciones de peligro en el arco de Nacional, en el que el golero Jorge Bava fue la figura. Nacional despertó en el complemento y estuvo cerca de vulnerar la valla que defendió Danilo Lerda. Además, el árbitro no pitó un penal a favor del tricolor.


Al ritmo de Peñarol
El fútbol de Peñarol fue el protagonista durante el primer tiempo y mereció adelantarse en el marcador, pero las atajadas del golero Jorge Bava y la actitud que tuvo la defensa tricolor evitaron la caída del arco.

Los aurinegros salieron a buscar la victoria apenas comenzó el encuentro y plantearon el partido en el área de Nacional, en donde en los primeros 45 minutos generaron cinco situaciones de gol: una de Zalayeta, dos de Olivera, una de Estoyanoff y una de Zambrana, que pegó en el horizontal, en tanto nunca llevó peligro al arco defendido por Danilo Lerda.

Nacional se refugió en su área y, sin Gonzalo Bueno, suspendido, Álvaro Recoba se quedó sin socio para lanzar el balón. Adrián Luna no tuvo un buen primer tiempo y lo absorbió la defensa de Peñarol. De esa forma, las sorpresas que suele llevar el tricolor a pura velocidad al ataque faltaron con aviso.

La actuación del árbitro Daniel Fedorczuk mereció un capítulo aparte, porque sus decisiones elevaron la violencia en el juego. Al minuto debió amonestar a Lembo por falta a Zambrana. Luego debió amonestar a Novick por una fuerte infracción a Alexander Medina. A los 8 minutos le sacó una amarilla a Macaluso por agresión a Luna, cuando tuvo que mostrarle la tarjeta roja y en el final del primer tiempo debió expulsar a Novick por una infracción sobre Medina.

El primer tiempo, que tuvo a Peñarol como único protagonista a la hora de jugar al fútbol y a Nacional defendiendo, no hubiera sorprendido si los aurinegros ganaban por dos goles y si los dirigidos por Da Silva se quedaban con nueve hombres.


Se recuperó Nacional
En el complemento cambió el partido, porque Peñarol ya no tuvo el protagonismo de la primera parte y los tricolores salieron a plantear el juego más arriba.

A partir de los 55 minutos los tricolores aprovecharon las fallas de la defensa de Peñarol. Con muy poco, porque Nacional atacaba con Recoba, Medina y Luna, los albos fueron haciendo su juego para comprometer el cero en el arco de los aurinegros. A los 67 minutos, en una pelota intrascendente, Lerda perdió el balón ante la presión de Luna, el delantero se demoró en definir y cuando buscó el remate, un gran cierre de Darío Rodríguez evitó la caída.

Nacional, que con Luna había generado la primera ocasión, a los 74 minutos estuvo cerca del gol en dos ocasiones, primero cuando Recoba sacó un disparo desde afuera del área que desvió Lerda, tras gran atajada, y en el rebote Luna remató afuera.
También el tricolor estuvo cerca del gol, pero lo impidió el árbitro cuando no pitó un penal a Luna, cuando fue derribado dentro del área. Fedorczuk lo amonestó al delantero porque entendió que simuló la falta.

En los últimos minutos, Peñarol asumió otra vez el papel protagónico que le imponía su mejor integración y en dos ocasiones se salvó el arco, en la primera, a los 84 minutos, cuando Bava le sacó un gol a Estoyanoff y, en la segunda a los 87, Zalayeta estrelló una pelota en el palo.