Se levanta el telón de la sub 20

Ecuador será a partir de hoy la casa de todas las selecciones sub 20 del continente en la disputa del 28º Campeonato Sudamericano sub 20, un torneo que oficia como vidriera de las grandes potencias de Europa y donde brillaron en su momento jugadores como Lionel Messi, Edinson Cavani, Neymar o Diego Maradona.

Con Argentina como actual monarca en la categoría, el Sudamericano de Ecuador se desarrollará hasta el 11 de febrero en la altura de cuatro ciudades enclavadas en la cordillera de los Andes (entre 2.220 y 2.850 metros sobre el nivel del mar).

Ecuador, por ser anfitrión, comanda el grupo A, integrado también por el vicecampeón Colombia, Brasil, Paraguay y Chile, mientras que Argentina lidera el B, que incluye a Uruguay, Perú, Venezuela y Bolivia.

Los partidos del grupo A se disputarán en los estadios Olímpico de Riobamba y Bellavista de Ambato, ambos al sur de Quito, y el B en el Olímpico de Ibarra, al norte.

Los tres primeros de cada llave clasificarán al hexagonal final del torneo, a jugarse en la cancha del Olímpico Atahualpa de Quito y que otorgará cuatro cupos para el Mundial sub 20 de Corea del Sur que se jugará entre el 20 de mayo y el 11 de junio de este año.

La selección sub 20 de Uruguay llega al certamen con la solidez que le da el proceso que encabeza Óscar Tabárez, con profesionales que mantienen un proyecto de trabajo y con jugadores que recorrieron todo el camino formativo.

Algunos están consolidados en primera división como Santiago Mele, José Luis Rodríguez, Nicolás De La Cruz, Rodrigo Bentancur y Joaquín Ardaiz, otros como Diego Rossi, Mathías Olivera, Rodrigo Amaral, Nicolás Schiappacasse y Agustín Canobbio ya debutaron pero les faltó continuidad, al tiempo que el resto del plantel aún espera su chance en primera, como Agustín Rogel, Santigo Bueno o Matías Viña.

Este equipo uruguayo tiene en la defensa y la zona media sus puntos fuertes, con jugadores potentes físicamente y con una riqueza técnica poco habitual. Llega con una dupla de zagueros (Bueno-Rogel) afianzada, laterales que aportan en defensa y ataque y un medio que sorprende por su calidad y visión de juego, con De La Cruz y Bentancur como abanderados.

El cuerpo técnico de Uruguay tuvo que hacer los cortes en el plantel sabiendo que Real Madrid no prestó a Federico Valverde, la gran joya de esta generación. En ataque están los mayores problemas, pese a que Joaquín Ardaiz y Nicolás Schiappacasse mostraron un gran nivel, ya que solo Diego Rossi es una alternativa de nivel en el recambio al igual que Rodrigo Amaral.

El rival será Venezuela, un equipo en el que todos sus integrantes juegan en Primera y que está en Ecuador desde el 26 de diciembre para aclimatarse a la altura.

Brasil, dueño del certamen con 11 de los 27 títulos disputados desde 1954, pretende retomar el sendero hacia la cima tras el tricampeonato logrado entre 2007 y 2011, y sus fracasos en los torneos de 2013 y 2015, donde Colombia y Argentina pudieron festejar.

¿Dónde entra Uruguay? El palmarés general incluye a la celeste con siete títulos, Argentina tiene cinco, Colombia tres y Paraguay uno solo. Sin embargo la sequía de Uruguay es importante, ya que el último título lo ganó en 1981.

Argentinos y brasileños son los únicos sudamericanos campeones mundiales de la categoría y Argentina tiene una responsabilidad extra de defender el título. "Argentina tiene la responsabilidad de tener el protagonismo por historia. El ánimo está bien arriba, vamos a tener una buena participación", dijo su entrenador Claudio Úbeda.

El equipo argentino llega sumergido en una crisis institucional decorada por ribetes insólitos. Hace pocos meses Argentina no tenía entrenador y la Comisión Normalizadora que intervino la AFA solicitó proyectos, de los cuales se presentaron 44 carpetas con nombres como César Menotti, Roberto Ayala o Gabriel Batistuta. Sin embargo el elegido fue Úbeda, que no había presentado ningún proyecto.

Hoy comienza a rodar la pelota. Y antes que el título primero se mira llegar al Mundial.