Daniel Angelici, Rodolfo D'Onofrio y Matías Lammens renunciaron ayer a sus cargos ejecutivos en la Asociación del Fútbol
Argentina (AFA), lo que abonó el terreno para un eventual cisma. La principal razón de ese interés es el bloque de otras instituciones, encabezadas por Independiente, para crear una "Superliga" de clubes.
La medida se produjo luego de la negativa de un grupo liderado por Independiente, Quilmes y Olimpo –más varios clubes del ascenso– de no dar quórum para la Asamblea Extraordinaria que iba a llevarse para discutir la reformulación del Estatuto y así poder debatir la creación de la Superliga.
Con la medida, además, el Ejecutivo de la AFA quedó fuertemente golpeado.
La crisis tiene además un trasfondo político: la medida de los clubes grandes tiene el apoyo del gobierno nacional de Mauricio Macri, mientras que Independiente es presidido por Hugo Moyano, líder del sindicato de camioneros y firme opositor de Macri.
Boca, River y San Lorenzo especulan con una figura de acefalía de la AFA, lo que daría pie a una intervención del ente, aunque desde el otro lado se asegura que las vacantes pueden cubrirse (Referí y El Cronista).