Que empiece el show: arranca el US Open

El tenis llega desde hoy a Flushing Meadows, en las afueras de Nueva York, para el US Open, el Grand Slam con más show y espectacularidad del mundo del tenis.

Durante las próximas dos semanas, miles de personas recorrerán las canchas del Complejo Billie Jean King, en una especie de Disneyworld del Tenis.

El show está garantizado afuera de la cancha y adentro, donde Novak Djokovic buscará recuperarse de sus últimas dos derrotas en las finales de Montreal y Cincinnati, para recuperar una senda que hasta allí venía casi inmaculada.

Djokovic y la estadounidense Serena Williams parten como claros favoritos para luchar por los respectivos títulos de campeones masculino y femenino.

El número uno del mundo ya logró esta temporada los títulos de Australia y Wimbledon, y para ganar su tercer grande del año tendría que imponerse en cuartos de final al español Rafael Nadal, que tras una muy mala mitad de año parece empezar a remontar.

Djokovic es el máximo favorito, pero viene de caer en las últimas dos finales de Masters 1000, en Cincinnati ante el suizo Roger Federer, y en Montreal ante Andy Murray, lo que asegura que el suizo y el escocés también llegan a tope.

Federer llega al Abierto de Estados Unidos en su mejor momento después de haber tenido buenas actuaciones en los Másters 1000 de Montreal y Cincinnati.

Y además no se puede olvidar a los jóvenes Kei Nishikori (4) y Marin Cilic (9), que el año pasado dieron el gran golpe al dejar afuera de la final a Djokovic y Federer. Milos Raonic (10)es otro de los que tiene su mejor rendimiento sobre canchas rápidas y puede entreverarse en la pelea.

El suizo Stanislas Wawrinka (5), actual campeón del Abierto de Francia, llega también con aspiraciones, pero antes, en cuartos de final, se encontrará con el británico Murray, que ha ido a más en lo que va de temporada.

En la competición femenina todo está mucho más despejado y definido en torno a la figura de Serena, la hermana menor de las Williams, número uno indiscutible del mundo y la gran favorita no sólo a revalidar el título de campeona, sino también a conseguir el ciclo completo en los torneos de Grand Slam, algo que no se ha logrado en 27 años.

La sorpresa la dio ayer la rusa y tercera preclasificada Maria Sharapova, que renunció a jugar el torneo por una lesión en la pierna derecha. El director del torneo, último del Gran Slam de 2015, David Brewer anunció la defección de Sharapova, que será reemplazada en el cuadro femenino por la 'lucky loser' Daria Kasatkina, de Rusia.