Rodolfo Suárez es el intendente de la ciudad argentina de Mendoza donde el próximo 1º de setiembre, Argentina recibirá a Uruguay por la séptima fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018. El hombre ya se puso en campaña, pero no de la política: quiere que Lionel Messi esté presente en ese partido y que revea su postura de dejar de jugar por la selección argentina.
Messi renunció a la selección en la madrugada del lunes, después de perder la final de la Copa América Centenario contra Chile por penales, donde falló en la ejecución del primer disparo argentino.
Y eso generó una conmoción deportiva que se enmarca dentro de un caos institucional de una dirigencia que navega sin rumbo y que es vigilada de cerca por la FIFA, siempre dispuesta a sancionar cuando los gobiernos intervienen con su justicia ordinaria en el mundo fútbol.
La situación dirigencial ya generó cortocircuitos importantes en plena Copa América.
"Una vez más esperando en un avión para intentar salir al destino... Que desastre son los de AFA por Dios", escribió un Messi molesto por la demora del vuelo que los llevó de Houston a Nueva Jersey, antes de la final.
A eso se le sumaron dificultades logísticas importantes, como que la selección no llevó juveniles para hacer de sparring en los entrenamientos y debieron entrenarse con mujeres de Estados Unidos. Además, el entrenador Gerardo Martino llegó a tener un atraso en el cobro de su salario de siete meses.
En noviembre del año pasado, se eligía presidente entre dos candidatos: Marcelo Tinelli y Luis Segura, el sucesor de Julio Grondona fallecido en 2014. Hubo más votos que votantes y las elecciones se pospusieron para el 29 de este mes. Tinelli se bajó de la candidatura el 2 de junio, dos días después de que la Inspección General de Justicia (IGJ) suspendiera las elecciones previstas para el jueves.
Desde que la justicia argentina suspendió las elecciones en la AFA, la FIFA sigue de cerca todo lo que pasa porque puede llegar a desafiliar a la AFA para el caso de constatar ingerencia gubernamental. Se tuvo que formar un comité de regularización que el viernes desplazó a Segura del cargo de presidente. La justicia argentina desestimó el apartamiento de Segura pero para el jueves invitó a los emisarios de la FIFA a tribunales para seguir el caso.
El título, perdido en los penales, pudo taparlo todo. Pero tratándose de una séptima final desperdiciada en forma consecutiva desde 1995 –entre copas América, Confederaciones y Mundial–, terminó agrandando la historia.
Tanto es así que antes de que la selección retornara a Argentina, se hablaba de que Martino iba a renunciar y que varios jugadores harían fila para retirarse atrás de Messi.
Pero las aguas se empezaron a aquietar. Martino no renunció y el lunes comienza a prepara la selección sub 23 que irá a los Juegos Olímpicos. Y ningún otro jugador manifestó que dejará la selección, pese a que Sergio Agüero declaró que había "varios" meditándolo.
El 1º de setiembre Uruguay visitará Mendoza. El 12 de octubre de 2012 perdió 3-0 con un Messi infernal. Ahora, el infierno tiene nombre propio: Argentina.
El fallecimiento de Julio Humberto Grondona terminó con años de poder en el fútbol argentino. Salieron a luz una serie de denuncias de amaños y manejo de árbitros que pusieron a los dirigentes en la lupa.
Desde la desaparición de don Julio la AFA es un barco a la deriva. Como será la cosa que realizaron una elección y hubo un voto más que los votantes habilitados. Pero lo peor es que la AFA está fundida. Todo esto perturbó a los jugadores de la selección que se quejaron de los vuelos durante la Copa América Centenario.
Equipo quebradoSi le preguntan a cualquier uruguayo en qué momento quisiera enfrentar a Argentina, seguro responderá mañana. Es que el equipo argentino está quebrado anímicamente luego de perder una nueva final. Las caras y las declaraciones de los jugadores fueron elocuentes. "Varios analizamos no jugar más con la selección", dijo el Kun Agüero.
AFA intervenidaLa investigación de la justicia argentina en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) generó la reacción de la FIFA. Los presididos por Gianni Infantino anuncian su desembarco en la sede de la calle Viamonte para poner un interventor y dejaron en claro que si el gobierno pone un pie adentro, la AFA será sancionada y sus clubes corren riesgo de no jugar los torneos internacionales. El gobierno ya anunció que no brindará más dinero para el fútbol como lo hizo a lo largo de los últimos años.
Desde que finalizó la Copa América Centenario se inició una danza de nombres como posibles candidatos a suplantar a Gerardo Martino. Es que, desde que el DT se metió en el túnel, los rumores sobre su renuncia invadieron el ambiente. Hay periodistas que le exigen que se vaya. Lo acusan de obedecer a Messi y no tener personalidad. La AFA le renovó el crédito.
¿A qué jugamos?Otro dato de la realidad que vive el fútbol argentino es que los dirigentes no saben ni qué tipo de campeonato jugar. Ni siquiera resolvieron la cantidad de clubes que serán en Primera luego de una prueba donde jugaron 60 clubes. El hecho es nadie aprueba la Súper Liga que es lo que propone San Lorenzo, el club donde está el reconocido conductor de televisión, Marcelo Tinelli. Muchos suponían que el conductor terminaba ganando las elecciones pero no llegó a los votos requeridos y le ganó la desconfianza. Tinelli renunció a su candidatura. Messi le pidió que no se bajara. Para colmo de males, la sombra de la justicia ronda por la AFA debido a que todos los extesoreros están procesados por el mal manejo de los fondos que destinó al fútbol.
Acaso se trata del tema que más impacto generó en el fútbol argentino. La decisión de Lio Messi de no defender más la camiseta albiceleste es un sacudón del que Uruguay puede sacar provecho. A nadie escapa que Argentina es una con Messi y otra totalmente distinta sin el 10.
Rojo suspendidoUn detalle que pasó desapercibido para el partido de setiembre por las Eliminatorias es la baja del lateral Marcos Rojo que fue expulsado en la final de la Copa América ante Argentina.
La presión del periodismoLa prensa de la vecina orilla está enardecida. Acusaron a los jugadores de "cebollitas", por salir siempre segundos, piden la cabeza del entrenador, y reclaman que se le brinde más oportunidades a jugadores del medio local y otros que militan en ligas sudamericanas como el delantero de San Pablo, Calleri.
Por estas horas Argentina es una olla a presión. Saber qué equipo y el ambiente que encontrará Uruguay cuando se mida contra la albiceleste, en setiembre en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, es una adivinanza. Muchos desearían que se juegue mañana.
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