En noviembre, el candidato a presidente Eduardo Ache lanzó el desafío a los hinchas de Nacional de llegar a 100.000 socios, y una de las primeras acciones del titular tricolor apenas asumió fue desarrollar una campaña que permitiera empezar a acercarse a esa cifra, que en otros tiempos del fútbol uruguayo era una utopía.
Con esa acción publicitaria y de marketing, que se suma a las que realiza Peñarol, los dos clubes grandes siguen alimentando esa necesidad en los hinchas de abandonar la categoría de simples parciales para transformarse en socios. Eso queda reflejado en los padrones de ambas instituciones, con una particularidad: que quien está más cerca de llegar a las seis cifras es Peñarol, porque en marzo alcanzará las 60.000 personas en sus registros, en tanto, Nacional tiene 55.000.
De todas formas, los dirigentes de Nacional y Peñarol son conscientes de que en este partido no pierde ninguno de los dos clubes, sino que ganan ambos, porque la rivalidad los va potenciando y permite aumentar sus ingresos.
Peñarol empató y pasó de largo
El primero que apostó a hacer explotar su padrón social fue Nacional, cuando con la llegada de Ricardo Alarcón a la presidencia en 2006 estableció diferentes estrategias que permitieron al club acercar a sus hinchas y fidelizarlos como socios. Esa situación llevó a que los tricolores alcanzaran registros históricos y, al mismo tiempo, hizo despertar a los aurinegros.
El momento que marcó un punto de quiebre en la historia de Peñarol se produjo en 2009 con la llegada del gerente general, Álvaro Alonso, y el gerente de marketing, Pablo Nieto, como parte de la reestructura que realizó el presidente Juan Pedro Damiani, que quería profesionalizar el funcionamiento de la institución.
A partir de ese momento la gráfica solo reflejó un crecimiento histórico y permanente. El punto de partida que establece Peñarol para marcar el vertiginoso crecimiento lo estableció en agosto de 2009. En ese momento, los auriengros tenían 12.594 asociados.
La conquista del segundo Campeonato Uruguayo de la década pasada, el de 2009-2010, en mayo de 2010, permitió a Peñarol dar el primer salto de calidad en el padrón social. Fue entonces cuando lo elevaron a 22.784.
El otro momento histórico del club, el vicecampeonato en la Copa Santander Libertadores de 2011, llevó a que los aurinegros alcanzaran 45.448 socios en junio y en marzo 2012 ya tenían 54.438.
En ese momento, según expresó Nieto a El Observador, 21.000 de los socios que tenía el club correspondían al interior, e informó que el departamento que más aportaba era Canelones.
El promedio: 68 socios por día
En los últimos 11 meses el crecimiento del padrón social ya no siguió el vertiginoso ascenso que se estableció en 2010 y 2011 y la gerencia del club apostó a generar acciones para cautivar y mantener a los que estaban en los registros, el segundo desafío que se plantea desde 2011 el club.
Actualmente, informó Alonso, el promedio es de 68 nuevos socios por día.
“Lo que hacemos en Peñarol son campañas permanentes durante todo el año. Algunas tienen mayor repercusión pública que otras”, explicó Alonso a El Observador. “No hacemos campañas de socios puntuales porque generás mucho ruido en un momento y después decae, y los socios aún no están enganchados”, agregó.
Peñarol cerró el viernes con 58.922 socios y al promedio que está creciendo el padrón social estiman que en marzo llegará a 60.000, mientras la carrera por llegar a los 100.000 sigue adelante.
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