La selección masculina de hándbol de Uruguay perdió en la madrugada del domingo 25-21 contra su similar de Estados Unidos en Auburn, estado de Alabama, y la posibilidad de clasificar a los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 se alejó un poco.
Sin embargo, la serie está abierta y los dirigidos por Jorge Botejara intentarán darlo vuelta el próximo sábado en el estadio Sergio Mato de Canelones.
Para ello necesitarán ganar por más de cuatro goles. Una empresa complicado en vistas a lo que pasó en el partido de ida donde Uruguay trabajó bien en defensa en el primer tiempo yéndose arriba 13-10 pero que sufrió en el segundo tiempo cuando el rival le planteó una defensa abierta y los celestes se quedaron sin ideas en ataque perdiendo el parcial 15-8.
Uruguay tendrá dos refuerzos seguros para el sábado: el golero Mario Sánchez, quien llegará de Ancona de Italia y el armador Gabriel Spangenberg quien se casó recientemente. La celeste necesita disimular dos bajas de peso: el golero Manuel Adler (Siracusa de Italia), quien no fue cedido por el club, y el armador español Máximo Cancio (Gijón), lesionado en un hombro.
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