El comisario preboste de la Policía Militar canadiense ha levantado dos cargos por agresión sexual contra el Teniente General retirado Trevor Cadieu quien había sido propuesto el año pasado como jefe del Ejército.
La acusación fue informada en un comunicado de prensa emitido ayer, en la que se consigna que los hechos habrían ocurrido en 1994 en el Colegio Militar Real de Kingston y fueron investigados por el Servicio Nacional de Investigación de las Fuerzas Canadienses.
Cuando la investigación estaba casi completa, la exjueza de la Suprema Corte, Louis Arbor recomendó –en un memorándum interno– que los casos de inconducta sexual deberían ser trasladados a la justicia civil. Los funcionarios militares dijeron que, en su momento, la policía civil había optado por no tomar el caso, pero ahora las actuaciones se harán ante el sistema penal civil.
El acusado se hallaba en Ucrania, donde asesoraba a las tropas que combaten contra el ejército ruso desde su repentino retiro de la actividad en el mes de abril. El año pasado se esperaba que Cadieu tomara el comando del ejército canadiense, pero la ceremonia de asunción fue pospuesta a raíz del inicio de la investigación sobre las acusaciones en su contra.
Ni bien se formalizó la acusación judicial, Cadieu regresó a Canadá para ponerse a disposición de la justicia, negando las acusaciones en su contra.
El juicio a Cadieu se inicia en medio de una crisis causada por una seguidilla de inconductas y agresiones sexuales y abusos de poder en todos los niveles de las Fuerzas Canadienses, incluso en el más alto nivel.
Los casos más notorios han sido los de el general retirado Jonathan Vance, quien se declaró culpable de obstrucción a la justicia en un caso de inconducta sustanciado contra él; el de su reemplazante como jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante Art McDonad, quien debió dejar el cargo en forma temporaria para enfrentar cargos similares y el del mayor general Dany Fortin, exjefe de la fuerza de tareas de vacunación por covid-19, acusado de agresión sexual por la fiscalía de Quebec.
La exjueza Arbor ha dicho en un reporte del mes pasado que los mandos superiores de las Fuerzas Canadienses se han mostrado incapaces de reconocer la deficiencia de la cultura interna de la comunidad militar que permite las agresiones sexuales y los abusos de poder. Las instituciones militares –ha dicho Arbor– no están en sincronía con los valores de la sociedad canadiense y representan un riesgo para ella.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá