En la jornada del martes, Ariel Ansaldo, conocido popularmente como Big Ari, hizo su retorno a la casa de Gran Hermano, generando un considerable revuelo tras su participación en el reality. El día anterior, fue el turno de Alfa, su rival de la temporada pasada, quien al verlo no pudo disimular su indignación.
Inicialmente, el ingreso de Ariel se produjo durante una edición especial de "Congelados". En esta ocasión, el ex concursante ingresó acompañado de Cariños, la mascota de papel de Juliana Furia Scaglione, la cual los participantes decidieron hacer volar atándola a una serie de globos con la esperanza de que se convirtiera en un "golden ticket" para el ingreso de un nuevo concursante. A pesar del gesto amistoso de Ariel hacia Furia, la armonía se vio interrumpida y la situación terminó en un enfrentamiento que generó controversia en las redes sociales.
Posteriormente, minutos después de su primera aparición, Big Ari regresó a la casa esta vez con una maleta y la intención de quedarse algunos días, al igual que su ex compañero. Su retorno fue recibido con alegría por parte de los participantes, quienes lo abrazaron y demostraron su felicidad, excepto la doble de riesgo, que optó por aislarse junto a su nuevo amigo. Este último, visiblemente molesto, se retiró a otro ambiente a la espera de ser convocado al confesionario para expresar sus quejas. "Yo no me voy a quedar si entra este tipo", expresó Alfa, mostrando su descontento.
Juliana optó por apartarse del grupo para acompañar a Walter y dirigir algunas observaciones punzantes hacia Ariel. "Tenés la voz parecida a Lisandro y me molesta escuchar tu voz", expresó Furia mientras el recién llegado conversaba con el resto de los participantes. Sorprendido por el comentario, Ariel preguntó: "¿Tengo la voz parecida?". “Sí, bajá un poco el tono de tu voz porque a él (por Alfa) le molesta, ¿dale?", ante la insistencia de Juliana, Virginia intervino para aclarar la situación: "Te está pidiendo que no hables fuerte porque a Alfa le molesta". Manteniendo su compostura, el exparticipante respondió con aplomo: "Bueno, taponcitos para los oídos".
Por otro lado, Juliana, quien desde el inicio mostró una personalidad aguda y enérgica, reiteró su solicitud: "Estoy diciendo que no grites tanto", le recordó desde la habitación mientras los demás estaban en el salón. En tanto, Ansaldo no se quedó callado y replicó a la influencer: "Bue... mirá quien habla".
Mientras tanto, Furia hizo algunos comentarios desafortunados sobre la presencia de Ariel en la casa, los cuales no fueron bien recibidos por los espectadores en línea e incluso generaron rechazo dentro de su propio grupo de seguidores. "Traigan más comida que este se come todo", fue una de las desafortunadas frases pronunciadas.
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