La selección uruguaya femenina de handball se clasificó este domingo a los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 al ganar un triangular disputado en República Dominicana bajo pésimas condiciones organizativas.
Las uruguayas se alojaron en un hotel donde se cortaba el agua, la luz e internet. Se perdieron la primera práctica porque el transporte llegó tarde. Y a la hora de jugar se encontraron con una cancha imposible, llena de goteras y con una humedad ambiente que había imposible jugar al handball.
El equipo de Leonardo Puñales le ganó el sábado 13-2 a Estados Unidos, pero el partido no terminó porque las estadounidenses se retiraron porque la cancha estaba en pésimas condiciones a causa de las lluvias, que provocaron filtraciones.
Con ese resultado, y el triunfo previo de República Dominicana sobre Estados Unidos por 11 goles, Uruguay quedó obligado el domingo a ganarle a las locales para conseguir su clasificación a los Juegos Panamericanos.
El partido, como todo el torneo, estuvo plagado de anormalidades, pero al final, la celeste se impuso 29-27 eliminando a las dominicanas en su propia casa.
Referí charló con el entrenador Puñales, la golera Agustina Modernell y la armadora Martina Barreiro para conocer lo que le tocó vivir a las uruguayas.
"Fue un evento muy complejo y desde hace mucho tiempo. No se sabía la fecha, no se sabía dónde se jugaba. Éramos cuatro equipos pero Nicaragua se bajó antes de que viajáramos. Al llegar éramos tres equipos. En Dominicana nos encontramos con problemas enormes por la lluvia, la humedad y la cancha", contó Puñales.
"El partido entre Estados Unidos y Dominicana fue muy incómodo de jugar. El de nosotros con Estados Unidos también a punto tal de que a los 20 minutos Estados Unidos se retiró. Les íbamos ganando por 11 pero como el partido no concluyó el resultado fue de 10 a 0 para nosotros. Es la regla del w.o en handball. Como Dominicana había ganado por 11 eso nos obligaba a ganar el partido porque el empate nos dejaba afuera", agregó,
"La cancha estaba muy complicada el domingo, por eso se decidió jugar en una cancha auxiliar, que es la cancha para hacer el calentamiento que tenía menos humedad", dijo Puñales.
"Las chiquilinas jugaron muy bien, estuvieron muy concentradas no solo en el juego sino en todo lo extradeportivo. El equipo estuvo a la altura, el partido se sacó y el objetivo de clasificar se consiguió", concluyó el entrenador.
"Logramos el objetivo que nos propusimos cuando terminaron los Juegos Odesur", dijo la golera Modernell.
En aquel torneo, Uruguay fue cuarto detrás de Brasil, Paraguay y Argentina y no pudo clasificar directamente a los Juegos Panamericanos. Solo quedó por encima de Chile y Bolivia.
Barreiro, por su parte, dijo: "Un día antes de viajar nos enteramos que Nicaragua no iba a participar. En el aeropuerto de Dominicana recién nos enteramos del fixture y estamos hablando de un torneo clasificatorio a Juegos Panamericanos", contó aún sorprendida por las pésimas condiciones organizativas.
"El transporte tardó bastante en llegar para ir a la primera práctica y debido a esa tardanza no pudimos entrenar en la cancha principal sino en la auxiliar y el cuerpo técnico suspendió la práctica porque con la humedad que había existían muchos riesgos de que se lesionara alguna jugadora. El segundo entrenamiento también se suspendió por la humedad y en la reunión técnica se adelantó el horario del primer partido entre Estados Unidos y Dominicana porque estaba anunciada lluvia y ya se sabía que la cancha tenía goteras", reveló Barreiro.
"Cuando fuimos a jugar contra Estados Unidos no nos pareció tan grave la cancha, pero en el calentamiento empezó a llover y la cancha estaba llena de goteras y había muchas personas con toallas secando la cancha. El ambiente era caótico", agregó.
"Teníamos que hacer el himno con entrada y presentación oficial, pero hubo caída de tensión y no había luz ni audio para irradiar el himno. Planteamos hacerlo a capella pero la organización dijo de ir directo al partido. Las condiciones no estaban aptar para jugarse y Estados Unidos se retiró. Planteamos ir a la cancha auxiliar, pero también tenía goteras", sostuvo Barreiro.
Modernell, por su parte, comentó: "El partido con Dominicana se adelantó para el domingo de mañana. Es un país tropical con un clima muy húmedo y calor por encima de los 30º. La organización decidió jugar en la cancha auxiliar que no tenía capacidad para la gente que había ido. Al costado de la cancha estuvo lleno de gente y para las punteras que jugaron fue un partido muy incómodo porque estaban sentados al lado de las líneas y la hinchada intentó apretar al ser un partido tan complicado y parejo. Pero así y todo conseguimos lo que vinimos a buscar y a partir de ahora empieza la preparación para los Juegos Panamericanos".
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