Boca Juniors derrotó 4-2 a Palmeiras por penales este jueves, luego de un empate 1-1 en el Allianz Parque de San Pablo, y se clasificó a la final de la Copa Libertadores.
Boca ya había eliminado a Nacional en octavos de final y a Racing en cuartos. Como en esas llaves, la figura descollante del equipo fue el golero Sergio "Chiquito" Romero que ante Palmeiras atajó dos penales.
Boca jugará la final el 4 de noviembre en el Maracaná contra Fluminense, verdugo el miércoles de Inter.
El partido se abrió a los 23' con un gran desborde de Miguel Merentiel y un notable movimiento de Edinson Cavani para lanzarse a la pelota y empujarla sobre el segundo palo.
El uruguayo dejó así atrás una racha de diez partidos sin marcar goles.
Tras marcar el gol, Boca se refugió en su campo y apostó a la generación de espacios para explotarlos con contragolpes.
Palmeiras se fue adueñando de la pelota y comenzó a generar chances de gol.
Pero Sergio Romero respondió con grandes atajadas.
A los 65' se fue expulsado Marcos Rojo lo que complicó a Boca.
Y siete minutos más tarde llegó el gol del lateral uruguayo Joaquín Piquerez.
El ex Defensor Sporting, River Plate y Peñarol metió un bombazo de afuera del área con su poderosa zurda y se vio beneficiado de un desvío. Romero llegó a tocarlo pero sin la firmeza de manos que había mostrado anteriormente. El juego quedó igualado.
Romero volvió a salvar el arco ante una gran chilena de Endrick y Cavani tuvo la última, a los 93', pero se resbaló junto antes de definir y su remate fue contenido por Weverton.
Tras seis minutos de tiempo agregado, el partido se cerró con empate a uno y la serie pasó a definirse por penales.
Cavani abrió la tanda de penales con una ejecución impropia para su clase y para su habitual forma de patear penales. Abió el pie y la tiró contra la izquierda, siendo fácil presa de Weverton.
Sin embargo, Raphael Veiga no lo pudo aprovechar y pese a rematar con potencia se encontró con un gigante Sergio Romero, que ya había sido decisivo ante Nacional y Racing, desde los 11 pasos.
El paraguayo Bruno Valdez adelantó a Boca 1-0.
El paraguayo Gustavo Gómez tampoco pudo con Romero, imponente.
Nicolás Valentini puso el 2-0 para Boca.
Kevin fue el primer jugador de Palmeiras en batir a Romero para el 2-1.
Nicolás Figal volvió a estirar la ventaja para Boca que quedó 3-1 a un fallo de Palmeiras del triunfo.
El turno le tocó a Piquerez que pateó en forma notable y pese a que Romero la tocó y la desvió igual pudo anotar dejando 3-2 al Verdao.
Pol Fernández pateó el quinto de Boca, reventó el arco ejecutando al medio y Boca pasó a la final de la Copa Libertadores. Curioso: el xeneize no ganó un solo partido de playoffs (tampoco perdió) y puede salir campeón.
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