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Nacional, entre los placeres y los pecados
Invicto en tres partidos de las fases previas de la Copa Libertadores, dos de ellos de visitante, y con buenas actuaciones en esos tres encuentros, el Nacional de Alexander Medina entusiasma a los hinchas que esperan cerrar la clasificación a la fase de grupos cuando reciban a Banfield el miércoles en el Parque Central.
En el comienzo de este nuevo ciclo, el conjunto del Cacique dejó en claro que quiere ser protagonista en todas las canchas y hasta el momento las sensaciones son positivas.
Pero, por contrapartida, en lo que va de la Libertadores mostró pecados que le han costado caro y que, en caso de no corregir, plantea un problema para el futuro.
Pecado I: las distracciones
El segundo gol de Banfield en Buenos Aires, que marcó el empate 2-2 con el que se cerró el partido, dejó en evidencia la desconcentración que sufrió el equipo. El tanto llegó de un saque lateral, un error imperdonable para cualquier equipo de fútbol.
En el envío, el ataque de los argentinos ganó por arriba la primera pelota y el balón derivó al segundo palo donde estaba Darío Cvitanich, nada menos que el principal atacante del equipo, libre de marcas para poner el empate.
Ocurrió en el final del partido, cuando los tricolores debían tener los ojos más abiertos que nunca para cuidar el 2-1 que se les terminó escapando.
"La jugada supuestamente tendría que estar controlada, un saque de banda, con mucha gente de nosotros en el área. Pero a veces las desesperación por querer sacar la última pelota te lleva a cometer algunos errores", dijo Medina al analizar lo ocurrido en el regreso de la delegación tricolor a Montevideo, este jueves.
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Pecado II: el juego aéreo
Para el entrenador tricolor, el rendimiento defensivo de su equipo en líneas generales "ha sido muy bueno". "Prácticamente no hemos tenidos opciones del rival salvo ayer que en un minuto nos hicieron el gol y un cabezazo", comentó tras el partido con Banfield.
Sin embargo, la zaga tuvo errores en el juego aéreo, tanto en el primer gol, donde Bertolo le ganó las espaldas a Fucile, como en el segundo, donde perdieron la primera pelota por arriba. Además, hubo otra acción, la última, en la que Conde sacó al córner un cabezazo que pudo torcer la victoria para los argentinos.
Casualmente se dio con Guzmán Corujo y Diego Arismendi como zagueros, ambos con 1,89 m de altura, cuatro centímetros más altos que el capitán Diego Polenta, quien cumplió su sanción y podrá estar en la revancha.
Pecado III: las espaldas de los laterales
Otra de las desatenciones que ha tenido el equipo de Medina han sido en los espacios en las espaldas de los laterales. En Banfield lo sufrió Espino en algunas ocasiones y también Fucile, cuando ingresó Bertolo y con Mouche le hicieron el 2-1 por su sector.
Ambos marcadores de punta suelen tener libertad para proyectarse –el gol de Espino es un claro ejemplo–, pero eso puede dejar huecos en el fondo en caso de que las coberturas no cubran todos los espacios.
A pesar de esos detalles defensivos, Medina señaló que en el cuerpo técnico están satisfechos con lo realizado en la Libertadores. "Principalmente el rendimiento defensivo ha sido muy bueno", señaló.
Pecado IV: reacciones desmedidas
Las pulsaciones de los futbolistas en distintos momentos de los partidos están al máximo y a veces pueden llevarlos a perder el control. Santiago Romero se molestó por un pisotón de Darío Cvitanich, reaccionó con un empujón y vio la tarjeta amarilla. Luego, tuvo que jugar con mucho cuidado de no ver la segunda, cometiendo una falta que lo dejó al filo de la roja.
Algo similar había ocurrido en la ida ante Chapecoense, en Brasil, donde Espino se fue expulsado tras cometer una serie de infracciones en un partido muy trabado. Nacional, que se había puesto 1-0 en el marcador tres minutos antes de la roja, tuvo que jugar los últimos 15 minutos con 10 jugadores, si bien luego dos brasileños también fueron expulsados.
Placeres I: adaptación a la idea
La propuesta de Medina fue rápidamente asimilada por sus futbolistas y en los partidos de Copa, y en la actividad local, quedó de manifiesto. El equipo intenta ser protagonista, si bien a nivel internacional tuvo más recaudos defensivos en momentos de los partidos.
Se trata de un equipo compacto, que se repliega para defender y que al momento de pasar al ataque lo hace con velocidad.
"A nivel local hemos logrado muy buenas cosas. A nivel internacional por momentos la circulación de balón es buena, atacamos muchas veces en forma rápida o contragolpes, tenemos que tener más posesión, en esos tenemos que hacer más hincapié", comentó ayer el DT.
Placeres II: medio adaptable
El mediocampo tricolor se para con tres o cuatro futbolistas. El juvenil Christian Oliva y Romero son los marcadores, mientras que Matías Zunino y Carlos De Pena se unen a esa dupla para defender pero tienen libertad total para pasar al ataque.
Medina señaló que emplea dos líneas de volantes distintas en la actividad local y en la internacional.
"Acá (en el Apertura) tenemos un medio de mejor pie y en la Copa tenemos un medio con mayor intensidad", señaló. "A veces perdemos un poco de posesión a nivel internacional pero tenemos más intensidad a nivel ofensivo, en el juego, en las transiciones. Esa mixtura estaría muy buena y vamos a tratar de encontrarla", agregó.
Placeres III: la rotación
Otro acierto del entrenador ha sido la rotación del plantel, dándole minutos a la mayoría de los futbolistas que lo integran, en los partidos de la actividad local y la Libertadores.
Eso permite una mayor competitividad entre los jugadores. Si bien es cierto que la exposición de la Copa motiva más que la actividad local, quienes han jugado en el Apertura tienen la posibilidad de mostrarse y aspirar a ganarse un lugar en el equipo "internacional".
Además, la rotación evita que haya sobrecargas físicas y lesiones, lo que permite contar con los mejores jugadores para los partidos más importantes.
Placeres IV: buenos rendimientos
El comienzo del ciclo Medina tiene a varios jugadores que pasan por buenos rendimientos y que parecen no sentir que la temporada está en sus primeras semanas. Conde mantiene su seguridad habitual, Fucile tuvo un gran partido por la izquierda ante Chapecoense, Corujo ganó confianza en la zaga, Arismendi dio una gran mano como defensa, Espino marcó un gol muy importante ante Banfield, Oliva es la gran revelación del Cacique, Romero aportó los dos goles ante Chape, Zunino ha sido figura en varios partidos, además de Viudez y Seba Fernández.
