Hacía casi dos meses que no convertía un gol y eso le pesaba.
La última vez había sido el pasado 21 de marzo cuando convirtió en el triunfo por 1-0 sobre Deportivo Alavés, el equipo de Facundo Pellistri.
Sin embargo, no se dejó estar, pese a un desgarro que lo dejó afuera tres partidos y una suspensión por acumulación de tarjetas amarillas.
Atlético de Madrid hizo de todo para llevarse la victoria contra Osasuna este domingo.
Jugó mucho mejor, pateó muchísimo al arco, pero por errores propios de definición o por buenas atajadas de Herrera, no conseguía el gol.
Para colmo, el rival llegó una vez sola, a los 74 y anotó, mientras en Bilbao, Real Madrid vencía 1-0 a Athletic.
Eso hacía que en las posiciones, Real Madrid quedara con 81 y Atlético de Madrid con 80 puntos a falta de una fecha.
Luego llegó el empate de Renán Lodi para Atlético de Madrid a los 81 minutos. De esa forma, quedaban iguales a los merengues en la tabla, pero como Real Madrid tiene ventaja en los enfrentamientos contra el equipo de Diego Simeone, de seguir todo igual en la fecha que viene que es la última, los de Zinedine Zidane serían los campeones.
Pero a los 87 minutos llegó la jugada de Yannick Carrasco por derecha y su centro atrás encontró a Luis Suárez, quien se sacó la mufa de encima y convirtió para el 2-1 final y que su club se mantenga como único líder de LaLiga cuando resta solo un partido.
Así fue el gol de Suárez que desató el delirio de todos los hinchas de Atlético de Madrid y del Cholo Simeone que empezó a correr para festejar como loco.
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