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Homicidio del peluquero en Recoleta: qué se sabe de Abel Guzmán, el asesino
El misterio y la consternación rodean al caso del asesinato ocurrido en la reconocida peluquería Verdini del barrio porteño de Recoleta. El protagonista de este trágico suceso es Abel Guzmán, un empleado de la peluquería, que permanece prófugo tras haber matado a su compañero de trabajo Germán Medina de un tiro en la cabeza.
A pesar de los intensos esfuerzos de las autoridades, Guzmán, de 43 años y residente en la localidad bonaerense de Merlo, sigue evadiendo el alcance de la justicia. El Juzgado N°48 ha firmado una orden de captura en su contra, y la División Homicidios de la Policía de la Ciudad ha asumido la responsabilidad de llevar a cabo las tareas de búsqueda.
Según se supo, Guzmán trabajaba en la peluquería de Recoleta desde hace al menos siete años, desempeñándose como colorista al igual que la víctima, Germán Medina. De acuerdo con registros previsionales, el acusado cuenta con una larga experiencia en el mundo de los salones de belleza, trabajando para reconocidos empresarios del sector. Mientras tanto, los esfuerzos por localizar a Guzmán han incluido allanamientos en su residencia en Merlo y en el departamento de su hermano en la Capital Federal, ambos sin éxito hasta el momento.
Un pelea de egos, el presunto motivo detrás del homicidio del peluquero
El pasado miércoles por la noche, en una reconocida peluquería de Recoleta, un cruce entre dos empleados terminó en tragedia, ya que uno mató a tiros al otro. De hecho, el lamentable suceso fue tomado por las cámaras de seguridad del local.
La víctima, llamada Germán Medina, tenía 33 años y es oriundo de Morón, rápidamente fue trasladada al Hospital Fernández por el personal del SAME, pero, aunque llegó con signos de vida, murió a los pocos minutos. Vale destacar que, a lo largo de su carrera como profesional, se desempeñó en desfiles, en televisión y para clientes famosos.
Medina solía mostrar mucho amor por su profesión ya que, mediante un video que compartió el local hace unas semanas, afirmó: “La peluquería me enseñó que el reflejo del espejo también es el verdugo. Dependiendo de cómo uno está, también te invita a querer hacerte más cosas. El estado anímico de cada persona va acompañado de como se ve y cómo se siente . Y acá en la peluquería aprendimos de que lo que hacemos con amor también se transmite a la clienta y eso se contagia”. Además, sobre la posibilidad de estar junto a Facundo Verdini, detalló que “te abre muchas puertas”.
De hecho, su propia hermana en dialogó con Infobae, mostró con sus palabras la pasión de que le ponía al hacerlo y dejó en claro que “estaba muy contento con este trabajo. Muy cómodo y siempre iba feliz. No entiendo cómo pasó esto ni por qué. Era una persona a la que querían todos”. Luego, al ser consultada por lo sucedido, contó que había cierta tensión entre su hermano y Abel Guzmán, el tirador, por “temas de clientes y agenda”, pero nunca se imaginó que se llegaría hasta este punto. "Sé que había problemas, pero nunca para llegar a este punto. Tengo miedo de que ya se haya fugado”, agregó. Además, con dolor, declaró: “No sé qué problema tenía esta persona, porque evidentemente era una persona problemática. Mi hermano me contaba y le contaba mi mamá también que había discutido un par de veces con él. O sea, no se llevaban bien dentro de la peluquería”.
Además, en sus redes sociales, hizo un posteo en el cual pidió que se haga justicia y que el acusado de matar a su hermano finalmente sea arrestado: “Esta lacra tiene que aparecer, Abel Guzmán! Trabajaba en la peluquería Verdini de Recoleta y se dio a la fuga después de dispararle a mi hermano, que falleció después de llegar al Hospital. Por favor hay que encontrarlo para hacer justicia. A mi hermano no me lo devuelve nadie, pero necesito de su ayuda para que pague por lo que hizo”.
Habló el abogado de la peluquería de Facundo Verdini
En una entrevista que mantuvo con TN, Cristian Benítez, abogado del establecimiento, aseguró que no se registraron previamente altercados que pudieran anticipar la tragedia, sugiriendo que el motivo podría haber sido un conflicto de egos.
Sobre el momento en que sucedió la tragedia, señaló que “habían terminado el día de trabajo y eran las únicas cinco personas que estaban. Se juntaron para distenderse y después cerrar el local”, y que “por lo que se ve en las imágenes, entiendo que había algún tipo de encono entre ellos y utilizó ese momento para descargar la ira. Otra explicación no le encontramos”.
Por otro lado, sobre Abel Guzmán, el principal acusado del homicidio, contó que trabajaba en la peluquería desde hace 10 años y que “era una persona retraída y solitaria”, y al mismo tiempo, abrió la hipótesis de que "puede ser un tema de egos o cuestiones personales por cumplir la misma función", ya que ambos eran también coloristas y de alguna manera, el tema sobre los clientes de uno y otro, generaba cierto conflicto.
Mientras tanto, Guzmán permanece prófugo, desencadenando una intensa búsqueda por parte del personal policial de la Comisaría Vecinal 2A. El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional número 48 ha ordenado la apertura de actuaciones por "Homicidio", con la intervención de la División de Homicidios de la fuerza porteña.
