Thomas Bach, presidente del COI: "Si queremos que los JJOO sigan siendo relevantes en el mundo, tenemos que ser digitales”

Antes de comenzar la charla, el periodista le muestra una foto, el dirigente alemán observa con atención, levanta la vista y se ríe, mientras le expresa en tono de broma, “estoy igual”. Entonces empieza a repasar los nombres de quienes aparecen en la vieja imagen.

La fotografía de 1997 corresponde a la primera visita de Bach a Montevideo.

“Esta es mi cuarta visita a Uruguay, la primera, que testimonia esta foto, ocurrió en 1997 cuando le entregamos un minibús al COU. Recuerdo muy bien aquel viaje”, se apura a resumir antes de entrar en temas de actualidad y en su mirada sobre Uruguay y el Movimiento Olímpico en Latinoamérica.

“Después hubo otros tres viajes a Uruguay, uno como presidente del Comité Olímpico de Alemania (ocupó el cargo entre 2006 y 2013) y dos veces como presidente del COI, en 2017 y ahora”.

Este lunes, entre la presentación del sello del Centenario del COU y el reconocimiento como Visitante Ilustre en la Junta de Montevideo, brindó esta charla a El Observador:

¿Qué implica para el presidente del COI este viaje a Uruguay?

En primer lugar, para mi tiene como objetivo celebrar los 100 años del COU, pero también es muy importante la amistad que me une a mi gran amigo Julio Maglione, a quien conozco desde 1993, cuando integramos la misma comisión de evaluación para los Juegos Olímpicos de 2004. En esa comisión estuve como presidente, cuando era muy joven en el COI, y Julio como miembro de la comisión me ayudó mucho. Conversamos a través de gestos, por las diferencias de idioma, pero fue impresionante. Julio con su inglés brillante y yo con mi pobre español, después de las reuniones, cuando quería saber el sentimiento y sensaciones de lo que ocurría, le preguntaba a él, quien hacía una evaluación perfecta de cómo actuaba la gente y por qué lo hacía de esa forma.

Maglione, quien tiene un recorrido como dirigente de 56 años, marcó una época en el deporte olímpico y durante estos dos días valoró su aporte a todo nivel. Además de lo que expresó públicamente, ¿cómo lo define?

Es un gran dirigente y marcó una época en el deporte mundial. Fue presidente de uno de los deportes más importantes (Federación Internacional de Natación). Consiguió que creciera esa disciplina, y la federación durante su mandato. Es una leyenda en el movimiento olímpico y en el movimiento deportivo mundial. Además, si no me equivoco, Maglione fue el primer presidente que al mismo tiempo actuó en un Comité Olímpico Nacional y en una federación internacional.  También fue el presidente de Panam Sports.

Recuerdo que en esa ocasión usted lo llamó especialmente para encomendarle la tarea de asumir al frente de Panam Sports, en un momento especial, tras la muerte de Vázquez Raña. 

Fue un momento muy complicado. Hablé con él y Julio no estaba muy contento con esa llamada.

Pero tomó el desafío.

Sí, porque le pedí que ayudara una vez más al Movimiento Olímpico, porque lo necesitábamos para impulsar un Panam Sports fuerte y unido, y el único que podía hacerlo era él. No veía a nadie más en ese momento para asumir ese rol, y lo hizo como suele hacer todo.

Inés Guimaraens

Sudamérica para usted representa un lugar muy especial en el mundo, porque fue elegido presidente en Buenos Aires hace 10 años. ¿Qué representa Argentina y el continente americano en su vida?

Es una historia muy larga, que se remonta a mi juventud, que me genera un afecto por Latinoamérica y por Argentina desde hace mucho tiempo. Esto comenzó cuando era un joven atleta de esgrima y llegué a Buenos Aires para participar en competencias mundiales. Desde entonces hice muchas amistades en Latinoamérica a raíz de esos eventos. Recuerdo de forma especial que con el equipo ganamos el Mundial de esgrima en Buenos Aires y fue un momento legendario. Esto ocurrió al año siguiente de los Juegos Olímpicos de Montreal 1976, cuando le ganamos a Italia (la medalla de oro). Italia quería tomar revancha de Alemania en ese Mundial de Buenos Aires 1977 y nos encontramos compitiendo en la final con un estadio colmado por 5.000 o 6.000 aficionados apoyando a Italia. La final comenzó con un triunfo mío en el primer combate, cuando nos pusimos 1-0, luego los italianos nos ganaron siete consecutivos para poner 7-1 y finalmente revertimos y dimos vuelta el resultado, lo que nos permitió conseguir la victoria y el título. Conseguimos algo que nunca había ocurrido ni volvería a plantearse en las finales de los mundiales.

Se le observa la emoción al relatar esta experiencia.

Fue muy emocionante, y es muy lindo recordarlo, por eso me vienen a la mente muchos eventos y amistades en América del Sur.

Y en 2013 volvió para que lo eligieran presidente del COI.

 Exactamente. Fue como cerrar el círculo, de ganar un Mundial a ser electo presidente en la misma ciudad de Buenos Aires. Fue verdaderamente especial.

Usted fue un deportista que compitió en las pedanas en la época en que el COI defendía el amateurismo, luego lo tuvo como dirigente en aquella etapa en la que ingresó el profesionalismo, ahora se integran los eSports. ¿Comienza una nueva era? ¿El COI se adapta a los nuevos tiempos? ¿Cómo definiría este proceso?

El mundo está en una nueva era. Es un nuevo mundo digital. Si queremos que los Juegos Olímpicos sigan siendo relevantes en el mundo, tenemos que ser digitales. Como ocurre con los medios de comunicación, que tienen que hacerse digitales para seguir siendo relevantes, en el Movimiento Olímpico ocurre lo mismo, porque la gente joven vive en ese mundo digital. En mi generación, cuando éramos niños y en algún momento teníamos que tomar contacto con el deporte, eso ocurría a través de los amigos, de los padres, en la escuela, con vecinos, siempre había contacto con el deporte. Ahora es diferente, muy diferente. La gente joven tiene muchas distracciones y muchas opciones para elegir.

Inés Guimaraens

¿Cómo consigue que esos jóvenes sigan compitiendo en el deporte y que no se vayan?

Yendo al mundo, yendo a las redes sociales y presentando al deporte en sus plataformas. Una de las primeras decisiones que adopté luego de ser presidente fue lanzar el Canal Olímpico, que se transformó en el Canal Olímpico Digital, y desde entonces les podemos mostrar el deporte a los jóvenes en las plataformas que les resultan más familiares y que manejan todo el tiempo. También en las redes sociales, en el canal de Youtube, que es muy popular. Y estamos acercándonos a los que llamamos eSports, que son los deportes virtuales, como por ejemplo el ciclismo como deporte digital, donde en tu casa puedes competir contra todo el mundo haciendo el mismo esfuerzo físico que si estuvieras en una competición en la pista o en la calle. También estuvimos viendo que estos jugadores cada vez más profesionalizados de los videojuegos más típicos como League of Legends o Fortnite se están dando cuenta que para tener una buena actuación en el alto nivel deben estar preparados física y mentalmente. Entonces, así es como estamos en contacto con ese mundo, con esa gente joven. Un aspecto muy importante y que hay que tener en cuenta es que estamos haciendo esto pero respetando siempre los valores olímpicos. No permitimos que haya juegos que sean discriminatorios o que se maten durante nuestros videojuegos.

¿Cómo imagina los JJOO París 2024?

En un gran nivel. El comité organizador está trabajando muy fuerte.

El domingo se reunió con el presidente de la República y con el secretario nacional del Deporte y usted habló de la grandeza de este país a pesar de su geografía. ¿Cómo pueden ayudar desde el COI a un país tan pequeño como Uruguay para seguir formando atletas de elite y que no se distancie aún más de las grandes potencias?

En el COI tenemos diferentes programas, como por ejemplo el de Solidaridad Olímpica, que ayuda a desarrollar el deporte en todos los países siguiendo la misión principal del COI, que también se basa en el marco de distribución solidaria del 90% de los ingresos que recibimos, que se canalizan a través del Movimiento Olímpico. Estos programas de Solidaridad Olímpica, con los que también se beneficia el COU, tienen un rango que apoya a los atletas, entrenadores, médicos y gestores administrativos del deporte. También, para los atletas tenemos diferentes programas, se les otorgan becas deportivas para que puedan entrenar, y hay becas para que puedan entrenar y trabajar o estudiar. Tenemos otra plataforma que es directamente para los atletas, que se llama Atletas 365. En esta se les brinda cursos para aprendizaje de gestión, para una etapa de transición para su carrera profesional y también cursos de formación en medicina, antidopaje, y otros temas para apoyar transversalmente a los atletas.

"Con el presidente (Lacalle Pou) que tienen ustedes, tan aficionado al deporte, están en las mejores condiciones para que el deporte en Uruguay pueda crecer"

¿Actualmente le quedan dos años de gestión en este período, cuáles son los grandes desafíos que tiene por delante en el COI?

El primer reto que tenemos son los JJOO de París cuya misión principal es unificadora en este mundo actual tan convulsionado, donde cualquier sector de la sociedad está politizado, la salud, la educación, el deporte y la cultura se ven influenciados por la situación política. Entonces tenemos que alejarnos y librarnos de estas influencias políticas para tener el apoyo de la comunidad internacional en nuestra misión unificadora del movimiento olímpico a través de los JJOO.

¿Este es un desafío que se le planteó históricamente al COI en distintos niveles?

Entiendo que como ocurre ahora no sucedió en el pasado, por las numerosas guerras que vemos, conflictos políticos, la geopolítica entre los diferentes países, las economías que van variando y siendo influenciadas por esta situación. Entiendo que el momento actual es más complejo que antes. En este mundo tan dividido y con tantos retos y problemas a nivel internacional la gente está pidiendo y deseando que el Movimiento Olímpico, los Juegos Olímpicos y los deportes sirvan como elemento de unión en esta humanidad tan dividida y que consiga unirse a través del deporte.

Inés Guimaraens

¿Cómo es la vida del presidente del COI?

Me siento muy afortunado. Estoy viviendo mi pasión por los atletas y el deporte. Sin embargo en la vida diaria ya no soy el dueño de mi día a día (se ríe) ni de mi agenda, porque alguien cada día me dice cuándo, dónde y cómo debo ir. Ya no soy un hombre libre (vuelve a hablar con una sonrisa), debo vivir con seguridad en este mundo tan confrontado y en donde la pasión del deporte es mucho más grande que los pequeños detalles.

¿Cuándo fue la última vez que salió de compras al supermercado?

A veces ni siquiera me permiten andar por la calle (se refiere a la seguridad). A veces intento ir por mi cuenta y manejar mi propio vehículo pero la seguridad no me permite porque no se fían mucho de la forma en que conduzco (se vuelve a reir).

Es mediodía en Montevideo y Bach transcurre sus últimas horas en Uruguay antes de emprender viaje a Argentina.

Se confiesa feliz por esta visita a Uruguay y felicita “por las dos medallas logradas en Santiago” (luego de la entrevista los remeros conseguirían la tercera), y en el final deja un mensaje al que los uruguayos se abrazan con entusiasmo: “Crucemos los dedos para que Uruguay logre una medalla en París 2024 para celebrar los 100 años de la primera medalla de oro y la primera participación en los Juegos Olímpicos”.