Nike sí o no: las razones del voto de cada uno

Defensor, Danubio y Wanderers: forman un bloque opuesto al de los clubes pro Tenfield (ver más abajo). Son clubes más fuertes (se los puede considerar "medianos" en el fútbol uruguayo) y tienen más independencia porque históricamente han formado más juveniles y con eso no han dependido tanto de Tenfield (de todos modos, Wanderers y Danubio atraviesan graves problemas económicos, y Defensor una seria crisis política). No votaron al actual Ejecutivo de Valdez, pero apoyaron la propuesta porque coincidían con la opción de ir por más recursos y marcar independencia con Tenfield.

OFI y Segunda Amateur: dos claros outsiders, que no tienen relación con Tenfield (sus torneos no son televisados por la empresa), y por eso eran ajenos a las lógicas de poder de los clubes de Primera. Los dos votaron sí y fueron claves para la aprobación de la moción del Ejecutivo.

Con una realidad política y económica totalmente diferente a Defensor, Danubio y Wanderers, Nacional se ha enfrentando a Tenfield en otros momentos. El expresidente Eduardo Ache -opuesto en varias ocasiones a Tenfield, sobre todo cuando era neutral de la AUF- había marcado una postura clara, pero el presidente José Luis Rodríguez terminó tomando la decisión tras analizar el contrato con los abogados del club. El tricolor también hizo pesar su apoyo a este Ejecutivo, en el que tiene a Alejandro Balbi.

Sud América y Plaza: son equipos gerenciados desde Argentina, y por eso en cierta medida se mantienen por fuera de la realidad del fútbol uruguayo y de la dependencia de Tenfield. El gerente deportivo de Plaza, Carlos Manta, había sido claro: "No le debemos favores a nadie". El representante de Sud América también respaldó al Ejecutivo y se extrañó porque en el mismo día de la asamblea llegaran nuevas ofertas.

Fénix: otro club que tiene una especie de "gerenciamiento" por parte de Jorge Chijane, exaliado de Casal, que hoy está en la vereda de enfrente. Chijane es el que sostiene al club, y si bien, como todos, recibe fondos de Tenfield, ha manifestado su discrepancia varias veces. De hecho, es el único que en la temporada pasada aceptó el patrocinio de Fox Sports, rival de Tenfield.

Fue la excepción de la asamblea. Está mucho más cerca de la realidad de los clubes del bloque pro Tenfield (de hecho, su presidente Juan Castillo reconoció que necesita US$ 50 mil para arrancar el torneo). Sin embargo, la postura de Castillo fue clave para torcer un voto por el que no estaban todos de acuerdo en la directiva.

Juventud, River, Racing y Cerro: forman parte del bloque de clubes que se enfrentaron duramente al expresidente Sebastián Bauzá, y a los que este acusó de un golpe de Estado. Son muy cercanos a Tenfield, y por eso se opusieron a la oferta de Nike, que perjudicaba a la empresa. Salvo River, los otros tres fueron parte de la denuncia a Conmebol, por la que fueron suspendidos varios dirigentes, pero que terminó con Eugenio Figueredo preso. River no siempre ha estado aliado al resto de los clubes del eje.

La Segunda Profesional también siguió ese camino, y cambió su postura respecto a la asamblea del viernes anterior, cuando votó por la afirmativa a la moción del Ejecutivo. Uno de sus mayores operadores fue el presidente de El Tanque Sisley, Freddy Varela, quien era parte del grupo del bloque anterior pero acaba de descender a Segunda.

Con una realidad totalmente diferente a la del bloque de clubes cercano a Tenfield, tiene de todos modos mucha cercanía con la empresa, representada en los US$ 7 millones que invirtió Tenfield para ayudar en la construcción del Estadio, al punto que, como expresó el dirigente Marcelo Areco, el club considera a Tenfield "un socio estratégico".

Está en las antípodas del eje pro Tenfield y siempre ha tenido una postura crítica con la empresa. Sin embargo, propuso la idea de una licitación –algo que favorecía a Tenfield- porque así lo ha defendido en otros casos de derechos que se ponen a la venta.

Boston River y Villa Española: vienen de la B y no forman parte del bloque de clubes más cercano a Tenfield, pero como el resto, necesitan dinero antes de empezar la temporada y no podían "darse el lujo" de enfrentarse a la empresa dueña de los derechos de TV.