Rafael Nadal terminó al borde del llanto. No porque David Ferrer le opusiera gran resistencia en la final del ATP 500 de Acapulco, sino porque su esperanza de volver a pelear los grandes títulos ante los mejores del circuito va tomando forma y color.
En la madrugada de ayer, el español vapuleó a Ferrer 6-0, 6-2 ganando su segundo título consecutivo tras imponerse en el ATP 250 de San Pablo.
Antes había retornado a la competición con un vicecampeonato en Viña del Mar tras estar ocho meses alejado de las canchas por una rebelde lesión en su rodilla izquierda.
Combatir contra el dolor y la ambición de los rivales que le tocó enfrentar, han sido una constante en su retorno.
Nadal, quien tras quedarse afuera del Abierto de Australia por la lesión cayó al quinto puesto del ranking, la lleva bien.
En Acapulco, a diferencia de lo que había ocurrido en San Pablo, conquistó el título, 52º de su carrera, sin ceder un solo set.
Y lo hizo en un torneo donde el nivel de la competencia se elevó notoriamente.
En semifinales tuvo que eliminar a Nicolás Almagro, undécimo jugador del ranking, mientras que en la final despachó a Ferrer como si estos ocho meses de ausencia en los courts no hubieran existido.
Fue Ferrer, de gran cierra de temporada el año pasado, quien le arrebató el número cuatro ATP.
“Si me preguntas si me veo capacitado para ganarle a un top 3, esta difícil, pero hoy he ganado al número cuatro del mundo y del cuatro al tres no hay mucha diferencia. Ferrer es uno de los mejores y más completos del mundo”, subrayó Rafa en la conferencia de prensa posterior a su conquista.
Al cemento
Nadal sigue paso a paso. Primero sobre lo que él considera tierra firme: el polvo de ladrillo, su superficie predilecta y la que eligió para disputar sus primeros tres torneos del año.
Y recién ahora dará el siguiente paso para pisar el cemento.
Primero afrontará hoy un partido de exhibición en el Madison Square Garden de Nueva York ante el argentino Juan Martín Del Potro.
Y desde el jueves estará presente en el Masters 1000 de Indian Wells, también sobre pista dura, el torneo donde demostró que podía ser competitivo en otras superficies y que supo conquistar en 2007 y 2009.
El año pasado fue semifinalista cayendo ante Roger Federer (6-3, 6-4).
Fue en Mallorca, una semana antes de viajar a Indian Wells, donde comenzaron a manifestarse sus problemas de rodilla. Hizo un tratamiento especial en California pero al seguir en competencia el dolor siguió.
El ranking
Y será ahora en Indian Wells donde Rafa defenderá por primera vez puntos.
El año pasado ganó 250 puntos tras vencer a Leo Mayer, Marcel Granollers, Alexandr Dolgopolov y David Nalbandian antes de perder con Federer en semis.
En este 2013 lleva ganadas 900 unidades. Pero por su ausencia en Doha y el Abierto de Australia había perdido 1.290 puntos.
El triunfo de ayer fue muy importante por el ranking ya que Ferrer defendía el título (e iba por el tetracampeonato) por lo que perdió 200 puntos.
Nadal estará desde este lunes a solo 410 unidades (6.665 contra 6.255) de recuperar el cuarto puesto ante un Ferrer que le ganó solo cuatro de las 16 veces en que se enfrentaron.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá