Messi recordará por siempre varios de su goles, sus logros y sus records, pero también tendrá como anécdota la vez que arribó al aeropuerto de King Fahd, en Arabia Saudita.
La gran expectativa que genera el astro argentino hizo que muchas personas fueran a buscar un momento con él por una imagen o un simple autógrafo, pero por cuestiones de seguridad la gente del lugar y la embajada argentina decidieron recibirlo con un gran “operativo especial”.
Sin embargo, el mayor peligro que corrió fue generado justamente por un militar que, sin querer, le apunto con su AK-47 directamente en la cara. El susto del jugador de Barcelona se trasladó por todo su cuerpo y se le estacionó en la cara. La imagen no nos deja mentir.
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