Martín Silva sale de las sombras

Es duro el arco. El golero suplente siempre queda a la sombra. Tabárez buscó un golero para su proceso. Pasaron varios por la valla. Que Carini, que Castillo, volvió Viera y finalmente en un joven Fernando Mulsera recaló la responsabilidad de custodiar los tres palos.

Y pasaron los años. Los campeonatos. Los partidos. Y su nombre se reiteró siempre. Pero el destino le jugó una mala pasada. Una lesión lo terminó radiando de dos de los partidos más importantes de los últimos años: el repechaje.

Fue entonces cuando Martín Silva, tantas veces relegado, dueño de un silencio ejemplar, recibe el justo premio de salir de las sombras.
“Desde que Fernando agarró el arco no lo largó nunca más, como es muy profesional no salió ni por lesiones ni por expulsiones entonces no lo larga nunca. Pero ahora los que empujamos de atrás debemos aportar lo nuestro y luego el volverá al lugar que le corresponde”, comenzó diciendo Silva a El Observador.

El uno reconoció: “Estuve mucho tiempo afuera y llegó la hora. Lamentablemente por la lesión de Fernando me toca y espero aprovechar esta oportunidad. Acá hay pocas posibilidades de rotar, porque el arco es así, el que va a este puesto lo tiene asumido. Me toca en un buen año en el que me sentí cómodo”, agregó el golero que tendrá su primera oportunidad de defender a la celeste en el repechaje.

“Esto no me pone nervioso ni me genera cosquilleos, estos son los partidos más lindos de jugar. Son los que se tiene más responsabilidad. La experiencia de la Copa Libertadores jugando por Olimpia fue importante porque el club lleva mucha gente atrás y se enfrenta a los mejores clubes de América, con figuras importantes y con la presión de los estadios donde se jugó”, agregó Silva.

El uno agregó: “En el arco hay que estar atento a todo, ellos rematan mucho de afuera del área, lo sabemos. Cuando llegan a la línea de fondo tratan de terminar las jugadas. Son un equipo efectivo, no convierten muchos goles pero tampoco reciben y de local se hacen fuertes”.

Consultado por El Observador sobre cuanto cambia no haber recibido la pelota del partido, respondió: “No recibir la pelota varía pero no va a ser muy distinta a la que estamos trabajando porque es la misma marca. Es la pelota con la que jugamos los torneos internacionales en América”.

Silva, siempre fiel a su estilo de golero serio, remarcó: “Tengo mucha confianza. Me agarra trabajando muy bien y eso ayuda a llegar más tranquilo. Siempre que estuve en el banco estaba dispuesto y con ganas de entrar en el caso de que me tocara. Sabía que por el nivel de Fernando me tocaba o por lesión o por expulsión y llegó el momento de aportar”.

Sobre el rival de turno, Jordania, reveló que la referencia son los números de las camisetas.

“Tienen buen juego aéreo como son los equipos de esta zona, se cierran bien y salen de contra. No es un partido fácil, nosotros que vivimos de esto sabemos que no se puede subestimar a nadie, por algo llegó a la misma instancia que nosotros y no van a querer dejar pasar esta oportunidad. Por los nombres es complicado informarse pero por los números tenemos una imagen formada del rival”.

El futuro
Silva no tiene claro su futuro. En los próximos meses puede quedar en condición de libre en Olimpia de Paraguay como consecuencia de una deuda. “El tema no es estrictamente futbolístico, vivimos días complicados en lo que al grupo se refiere por la relación que tenemos con la institución”.
Posteriormente agregó: “Puedo quedar libre porque hay un reclamo por una deuda de premios de Copa Libertadores que Olimpia está intimado a pagar y si no lo hace quedaría libre”. Y agregó: “Pegamos un bajón muy marcado, campaña muy mala para un club grande”.

Sobre su situación concluyó: “No jugué porque el técnico sabía que no me podía tener para el clásico y puso al suplente”.