Esta noche a partir de la hora 20.15 en el Palacio Peñarol,
Malvín y
Hebraica Macabi volverán a verse las caras en el marco de la segunda semifinal de la
Liga Uruguaya de Básquetbol en una llave que por ahora gana el macabeo, actual monarca de la competencia doméstico, por 1-0.
A pesar de las bajas de Sebastián Izaguirre (lesionado) y Agustín Zuvich (suspendido), Hebraica Macabi logró llevarse en el partido del martes el primer punto de la serie ante Malvín con una victoria contundente en cifras de 92-78, lo que le permite al equipo de Leonardo Zylberstein encarar con otro aire este partido revancha de semifinales.
Para Malvín, otro de los equipos acostumbrados a estar siempre en las instancias definitivas, será un partido de alto riesgo ya que demostró estar lejos del nivel del rival en el primer partido y otra derrota lo podría dejar al borde de una eliminación temprana.
El perímetro es de Macabi
La llave del partido la tendrán sin duda Nicolás Mazzarino y Leandro García Morales, los escoltas goleadores que tiene cada equipo.
En la gestación del juego Hebraica tiene un plus en la juventud de Luciano Parodi sobre la experiencia de Federico Bavosi, a quien le cuesta mantener el nivel en 40 minutos de alta competencia contra una defensa que propone la intensidad como cerrojo.
En la administración del partido el equipo de Pablo López debe tener cuidado a las excesivas rotaciones ya que son un arma de doble filo.
A la intención de tener a los jugadores siempre frescos y al banco enchufado en el partido, se le debe sumar la cara negativa y es que muchos de los jugadores que vienen del banco perdieron sus duelos individuales ante el rival, lo que generó por ejemplo que en el primer partido Macabi pudiera sacar una diferencia mayor en el tercer cuarto cuando el punto de quiebre del juego fue un parcial a favor de 30-18.
En la pintura debe mandar Malvín
En la zona pintada el duelo será desparejo ya que Malvín tiene mayores opciones. Allen Durham, Marcel Souberbielle, Hatila Passos y Lorrenzo Wade suman altura, contacto y buen tiro desde media distancia para el playero, mientras que Jimmy Boston y Jaime Lloreda serán los únicos argumentos del campeón, que buscará llevar el partido hacia el juego de perímetro.