Los riesgos de salir del Centenario

La estadística es una ciencia que demuestra que si mi vecino tiene dos coches y yo ninguno, entonces yo tengo un coche”, dijo Bernard Shaw. Pero las estadísticas son engañosas si uno se deja engañar. Peñarol no perdió partidos en lo que va de la temporada cuando le tocó salir del Centenario. La primera lectura de los números dice que está invicto. Sin embargo, en los siete partidos que jugó afuera del escenario donde oficia como local dejó 10 puntos por el camino.

No es algo nuevo. Está en las raíces del fútbol uruguayo: los grandes sufren cada vez que salen de sus estadios.

Y este Peñarol no es la excepción. Ayer volvió a dejar puntos por el camino.

Teniendo en cuenta que en la Tabla Anual –que ya es cosa juzgada – Nacional le lleva 13 puntos de ventaja, es que se puede apreciar lo importante que son estas 10 unidades que los aurinegros dejaron por el camino fuera del Centenario.

Todo empezó cuando Defensor Sporting lo llevó al Franzini en la cuarta fecha del Apertura. El equipo, entonces dirigido por Jorge Fossati, empató 0 a 0 en aquel partido que jugó Jonathan Rodríguez luego de no ser cedido a la selección por un golpe en el tobillo.

Si bien Peñarol no perdió y mantuvo su arco invicto llegando a 360 minutos sin recibir tantos, sí dejó sus primeros puntos en el certamen.

Dos fechas después El Tanque Sisley lo llevó a Florida y tampoco pudo ganar: 1 a 1 con gol de Juan Manuel Olivera, el único que marcó en lo que va del Campeonato Uruguayo.

Que Danubio se hace fuerte en Jardines tampoco es novedad y esa salida a los aurinegros le costó otros dos puntos: 1 a 1 con anotación del Japo Rodríguez, que ahora anda peleado con el gol.

Tras el revolcón clásico, volvió a salir porque Fénix hizo lo mismo que Racing le hizo a Nacional esta fecha: lo llevó al Viera.

Peñarol, ya dirigido por Paolo Montero, triunfó 2 a 1 con goles de Jonathan Rodríguez y Zalayeta que dieron vuelta un marcador abierto por Gonzalo Papa.

A Bengoechea le tocó debutar oficialmente en el Tróccoli ante Cerro y si bien goleó 3 a 0 (Jonathan Sandoval, Zalayeta y Aguiar) el equipo no jugó un buen partido.

El resto es historia reciente. Los equipos del interior lo llevaron a su tierra y le robaron puntos.

Primero Tacuarembó, el equipo que desnudó la gran falencia defensiva que tiene este equipo, falto de marca y de seguridad en el lateral derecho.

Aquella noche, en el Atilio Paiva Olivera, un gran desborde de Nicolás Fagúndez, marcado por Valdez que salió a cubrir las espaldas de Rodales, terminó en gol de Aldo Díaz.

Y ayer fue Atenas. Peñarol saldó su visita con empate. La Anual ya es historia. El Clausura se le va.