Las vallas de Londres están malditas

Mala suerte para dos campeones de los 110 metros con vallas: el cubano Dayron Robles abandonó el miércoles en la final dando muestras de dolor, mientras que un día antes otro tanto ocurrió con el chino Liu Xiang los Juegos Olímpicos de Londres.

Sacando provecho de las bajas de los dos campeones previos, el estadounidense Aries Merritt se llevó la medalla de oro y su compatriota Jason Richardson la de plata. El jamaiquino Hansle Parchment se colgó la bronceada.

Robles, campeón olímpico en Beijing 2008 y dueño del récord mundial de la especialidad, abandonó tras saltar la sexta valla y agarrarse el muslo derecho.

El cubano se sentó luego en la pista, mientras Merritt festejaba su triunfo, el mismo que cosechó el ahora infortunado Liu en Atenas 2004 y que en una etapa preliminar quedó afuera cuando tropezó en la primera valla y cayó violentamente al suelo.

Al momento de su abandono, Merritt le estaba sacando una leve ventaja a Robles.

"Simplemente sentí un problema en la 'hamstring' (corva en inglés) y tuve que parar", dijo Robles. "Fue una mala suerte porque arranqué súper bien; no tenía ningún problema y había clasificado con el físico entero".

Robles, quien de a ratos se pasaba una mano por el muslo derecho, recordó que esta temporada sufrió algunas lesiones en la pierna izquierda que lo tuvo a maltraer.

Se le preguntó a Robles concretamente qué tipo de lesión acusa y qué será de su futuro.

"Esto es una olimpiada, esto es atletismo", contestó el velocista. Y alzó sus dos manos como fastidiado, hizo una mueca de disgusto y se fue.

Su compatriota Orlando Ortega terminó sexto.

"Para mí, en mi primera olimpiada, es como haber ganado un oro", dijo Ortega tras esa prueba en la que Estados Unidos recuperó prestigio con sus dos primeros puestos.

Merritt cronometró 12.92 segundos, apenas una centésima por encima del récord olímpico de Liu. Richardson lo escoltó con 13.04 y Parchment fue tercero con 13.12.