El paso del tiempo fue agravando la problemática de la seguridad en el fútbol. En un país chico como Uruguay, donde todo queda resumido en la frase "nos conocemos todos", no han podido controlar a los grupos que generan incidentes.
El incremento de las medidas de seguridad fue de la mano con el aumento de los problemas. El tema es que, por culpa de los pocos que generan desmanes, las consecuencias las paga la mayoría.
Estas son algunas de las medidas que se tomaron en los últimos años, que afectaron a los hinchas que van al fútbol a disfrutar un espectáculo. En estas decisiones están involucrados los de a pie, que muchas veces deben volver caminando porque las empresas de transporte hacen paro, o hasta los que tienen palcos o butacas que, cuando cierran la cancha, se ven perjudicados porque pagaron por un espacio que no podrán disfrutar.
Una de las medidas más polémicas de los últimos tiempos fue la referida a que no se venden entradas el día del partido. Esto generó una merma en la venta porque los uruguayos están acostumbrados a salir para la cancha después de un almuerzo o un asado. Ya no lo pueden hacer.
Otra de las decisiones que generó más polémica fue la de prohibir el ingreso de botellas de plástico con refrescos o agua. Esto despertó eternas discusiones en las puertas de ingreso. En un día de calor, acompañado por un menor o por un mayor, no puede ingresar con la botella. En los últimos tiempos flexibilizaron las medidas y permitieron el ingreso de la bebida pero sin la tapa.
La medida de sacar a la policía de las canchas liberó las tribunas. Se dispuso de guardia privada pero el tema es que si se producen incidentes no ingresan. ¿Qué pasa si roban a un espectador en un baño? Bajo estas condiciones hay gente que prefiere no asistir al fútbol para evitar pasar un mal momento.
Entre las medidas que se tomaron por parte de la AUF está la de jugar sin público o impedir que los clubes jueguen en sus canchas. En este caso se ven perjudicados los que compraron palcos o butacas.
Durante un buen tiempo se impidió el ingreso del termo y el mate. La medida también generó incomodidad. El tema no está del todo claro y al día de hoy mucha gente pregunta si se puede ingresar con termo y mate.
El ingreso de radios también estuvo prohibido. Se consideraba que las pilas podían ser utilizadas como elementos para agredir ya que eran lanzadas a la cancha.
Debido a los problemas generados por los revoltosos, en todas las canchas se adoptó la modalidad de programar la salida de las hinchadas. Y pagó la gente, porque ahora salen primero los ocupantes de la tribuna visitante y los locales quedan 15 o 20 minutos esperando adentro. Por eso hay hinchas que se van antes, apenas hacen el anuncio por los altoparlantes.
Ya pasó antes y durante un partido que, por incidentes, fueron suspendidos y la gente tuvo que volver a su casa sin poder ver el espectáculo por el que pagó la entrada. El último ejemplo fue Nacional-River donde agredieron un portero, las gremiales se retiraron, y el partido se suspendió. Otros: Rampla-Peñarol suspendidos en el entretiempo por un baleado en la Ámsterdam y el clásico del Uruguayo Especial.
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