El 17 de octubre del año pasado Nacional le ganó 2-0 a Fénix en el Parque Central. Una victoria difícil, pese al resultado. El primer gol tricolor ocurrió a los 63 minutos y fue en contra de Ignacio Pallas; el segundo se dio a los 90+3 por intermedio de Ignacio González. Igual que el sábado pasado, Fénix se quedó con 10 hombres en el primer tiempo (resultó expulsado Mateo Carro) y le allanó el camino a su rival. Pero, ese partido tuvo otro ingrediente: la molestia del técnico de Capurro, Rosario Martínez, por las declaraciones de su colega tricolor, Gustavo Munúa.
Al día siguiente, Rosario, que no se calla nada, escribió en su cuenta de Twitter: "Como cambiaron los tiempos que ahora los técnicos de los equipo grandes se quejan. Qué fácil es hablar cuando estás parado en un pedestal".
Y agregó: "Yo me crié en la época en que los técnicos de los equipos chicos se quejaban, pero ahora son los técnicos de los grandes los que se quejan. Como cambió el fútbol uruguayo".
El enfrentamiento tuvo otro capítulo el sábado último tras el polémico partido del Clausura cuando Martínez agradeció la "actitud" y "colaboración" de varios actores de Nacional, pero omitió nombrar al técnico porque según le dijeron, "presionó" para que el partido se jugara.
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