La importancia de Zambrana

El mundo ofensivo de Peñarol se ha centrado en los últimos partidos en lo que puedan funcionar sus dos torres, Juan Manuel Olivera y Marcelo Zalayeta, y está bien que así sea.

No obstante, hay otro jugador que en las últimas fechas –sobre todo en las dos pasadas, en los que fue titular– ha resultado fundamental para el repunte de mitad de cancha hacia arriba que ha tenido el equipo que dirige el Polilla Da Silva.

Se trata de Jorge Zambrana, quien se ha transformado en gran parte en el titiritero del equipo, en el hombre que estaba buscando el entrenador para que con su fútbol, abasteciera a los dos delanteros que ya se sabe que son trascendentes a la hora de pensar en las redes ajenas.

Con el exRiver parece que el Polilla le ha embocado en una posición difícil, sobre todo, porque Peñarol no ha tenido a un enlace, juega sin un futbolista de esas características y en los encuentros anteriores a la entrada de Zambrana, muchas veces le costó muchísimo llegar con criterio al área rival.

Claro que el volante no es perfecto y, como demostró y quedó demostrado el pasado sábado en Cerro Largo, no jugó bien tácticamente. Sí lo hizo con la pelota, con desbordes continuos, con asistencia de gol y con un tanto. Pero a la hora de bajar a marcar para ayudar a los hombres del medio –Novick y Grossmüller–, no lo hizo, y fue reprendido por alguno de sus compañeros como por ejemplo, el capitán Darío Rodríguez al término del primer tiempo.

Es que el propio Darío juega por el mismo carril que Zambrana y fue –junto con la dupla de doble 5– quien más sintió su “ausencia” táctica.

Tampoco se calló la boca el Polilla Da Silva cuando terminó el encuentro y dijo exactamente eso, que el volante no había cubierto bien a sus compañeros y que era un tema a arreglar de cara al futuro.

Esta semana que pasó en Los Aromos, el entrenador mirasol habló con el jugador y le hizo ver que así no ayuda al equipo. Obviamente que no es el único que no cumple tácticamente, pero el sábado fue lo que más resaltó a la vista.

Mejorar más
Zambrana es el mejor asistidor de Peñarol en lo que va del Torneo Apertura –junto con el Lolo Estoyanoff–, ya que hasta ahora, cada uno dio tres pases que terminaron en gol. A esto hay que sumarle que es el segundo goleador de los aurinegros junto a Marcelo Zalayeta con tres tantos cada uno en estas primeras siete fechas.

Para dar un ejemplo del poderío de este trío, cabe consignar que entre Zalayeta, Olivera y Zambrana, han convertido, a su vez, los últimos 12 tantos que anotó el carbonero en este certamen. Son números que hablan por sí solos.

Además, Zambrana estuvo presente en cuatro de los últimos seis goles de Peñarol. Le dio el pase a Olivera en el primero ante Central, le hicieron el penal en el segundo, y ante Cerro Largo, dio la asistencia para Olivera en la apertura y convirtió el transitorio 2-0.

Pero más allá de todo esto, los tres jugadores, Da Silva y el resto del plantel tienen muy claro que deben mejorar su rendimiento porque Peñarol sigue sin mostrar lo que puede y gana con lo justo ante rivales de escasa enjundia como Central Español y Cerro Largo, los dos que marchan últimos en el campeonato. Si bien ante los palermitanos ganó claramente, de todas formas, dio ventajas claras tanto en la mitad de la cancha, como atrás.

Y ni que hablar en Melo ante los arachanes, quienes fueron los que hicieron el gasto, más allá de que la victoria fue aurinegra.

El domingo enfrentará a uno de los líderes del torneo como El Tanque Sisley que seguramente lo podrá complicar bastante si no cambia el juego. En eso, Zambrana también puede ser trascendente para bien o para mal.

Los fusionados cuentan con un técnico inteligente, que lee muy bien los partidos y que utiliza las escasas piezas que tiene de la mejor manera. Así siempre ha sido Raúl Möller.

El Polilla tiene a Zambrana, la pieza diferente para un planteamiento fundamental en busca de una nueva victoria.