Dakar

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La historia volverá a repetirse

Los uruguayos se hacen fuertes en el Dakar; a Lafuente lo tildaron de “loco”, en tanto que a Lazard le dieron “hojas de coca”, en medio de un rally complicadísimo
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20 de enero de 2012 a las 20:47

El rally raid Dakar tiene ese que se yo… Porque es tremendo, duro, penoso, incluso mortal y sin embargo, todos quieren volver.

Los cuatro uruguayos que tomaron parte en la competencia más dura que existe sobre la tierra, no escapan a ese sentimiento. “Voy por mi venganza…”, ha dicho a quien lo quiera escuchar el motociclista uruguayo Laurent Lazard tras arribar exhausto a Lima. Apenas bajó del podio ya estaba en su cabeza volver en 2013. Y fue su peor Dakar…

No es la excepción. Es más, todos –incluyendo los otros tres deportistas celestes– piensan igual.

Eso es el Dakar y por eso los cuatro uruguayos volverán. Una aventura única, inigualable. Un sentimiento difícil de explicar.

Ciertamente que al venirse el Dakar a tierras sudamericanas, los pilotos de esta parte del mundo tienen ante sí la gran posibilidad de medirse física y sicológicamente.

Pero dada la escasa experiencia que hay en Uruguay sobre este tipo de carreras, no era de esperarse grandes resultados.

Sin embargo, Sergio “Oso” Lafuente derrumbó la teoría de tal manera que inscribió su nombre y el de este país en la más rica historia de la carrera: cinco podios en 13 etapas, dos de ellos en el primer lugar y durante dos días fue líder de la clasificación en el apartado Quads.

Pero a punto estuvo de perderlo todo. Incluyendo su Quad: “Se me salió la cadena y la falta de tracción me tiró del cuadriciclo. Cuando pude levantarme del porrazo busco mi máquina y no la veo hasta que me doy cuenta que seguía con el impulso avanzando en una gran bajada de la duna. Felizmente en un sector de arena se trancó un poco y pude alcanzarlo. De lo contrario, creo que lo perdía. Quedé exhausto corriéndolo…”, destacó.

Siempre hay que seguir. La meta es precisamente…la meta. “En la tercera etapa me quedé sin frenos en el Quad”, continúa relatando Lafuente. “Venía muy rápido en una bajada y no pude frenar al llegar al cauce de un río. Así que me tiré así como venía y que fuera lo que fuera. Pase a tres motos juntas y ahí fue que me tildaron de ‘Uruguayo Loco’. Lo que no sabían era que no podía frenar…”.

Lafuente relata el momento clave en el que el piloto estadounidense Robby Gordon perdió toda su chance de victoria en la clasificación de autos: “Yo venía en la tierra de Robby Gordon y consigo ver que se pasa en una curva y cae nueve metros al vacío. Cuando llegué al lugar paré y desde lo alto le pregunté si estaban bien y si necesitaban algo. No me dio ni bolilla. Estaba dándole puntapiés al Hummer anaranjado porque se le habían explotado dos neumáticos”.

En un primer balance de su actuación en el Dakar 2012, Sergio “Oso” Lafuente reconoce que el resultado fue “muy bueno” y que en comparación a su debut en 2011, “mejoramos muchísimo. Ganamos etapas y hasta pude ganar alguna más”, reconoció.

Pero no lo deja dormir el hecho de que por una tontería, se perdieron todas las chances de ganar o al menos, de estar en el podio final: “Es el sabor amargo que me queda y creo que se me va a quitar recién cuando largue el próximo Dakar. Pero una tontería perdí casi cuatro horas y eso en el Dakar es lapidario porque te retrasa en el camino y al día siguiente salís a la carrera con pilotos más lentos, vas en la tierra de ellos y ya tu ritmo es otro. Recuperar ese tiempo perdido en el Dakar es imposible”, explicó.

La tontería fue que nunca antes de la competencia “pese a que se repasó una y mil veces todos los detalles del Quad”, se probó el neumático de auxilio. El tema es que Lafuente pinchó y cuando fue a cambiar el neumático por el de auxilio, éste no entraba. Tras intentarlo todo, optó por seguir pinchado hasta el reabastecimiento de combustible y allí un piloto italiano le cedió uno que calzaba en el eje.

Pese al tremendo esfuerzo y al desgaste de los 13 días de velocidad y 15 de competencia, Sergio Lafuente dijo que físicamente y mentalmente llegó entero a Lima. “Si me decían allí que largábamos de nuevo, estaba listo. El trabajo de preparación durante el año fue muy bueno”, reflexionó.

El uruguayo confirmó que durante 2012 realizará varias carreras del Campeonato Mundial de Cross Country mechadas con alguna carrera similar en la República Argentina, país que al influjo del Dakar, desarrolla competencias de este estilo con mucho prestigio.

Por su parte, el motociclista uruguayo con más experiencia en el Dakar Laurent “Lorenzo” Lazard, pudo finalmente completar otro Dakar. El piloto fue el primer uruguayo en arribar a la meta de la carrera cuando ésta se realizaba en territorio africano.

“Recuerdo que estábamos en la última etapa en suelo argentino y ya se me había acabado todo el líquido debido a que la temperatura era muy elevada. De repente vi a un grupo de personas que aisladamente estaban viendo desde lejos como pasaban los competidores. Fui hasta ellos y les pregunté si tenían algo fresco, una Coca. De inmediato uno de ellos fue hasta una camioneta y me trajo…hojas de coca. Por supuesto que se lo agradecí, las agarré y cuando ya no los veía, las tiré…”.

Ciertamente que es parte del folcklore dakariano.

Recordando lo que a su juicio fue el Dakar más complicado que le tocó correr, el motociclista compatriota dijo lo siguiente: “Francamente y debido a los problemas estomacales, no daba más. Estaba muy disminuido físicamente y varias veces se me pasó por la cabeza abandonar. Pero debo reconocer que la estrategia de Verónica –mi señora– fue determinante. Cada mañana antes de largar me enviaba fotos vía celular de mi hijita Helena recién nacida. Lograba motivarme. Estoy deseando llegar a Atlántida para no despegarme de ellas…”

En la etapa maratón –segunda mitad de carrera– todas las motos y cuadriciclos no pudieron realizar asistencia de manera que los pilotos durmieron todos juntos en una gran carpa que tenía tres lados cerrados y uno abierto. “Para mí no era novedad ya que cuando participe en el Dakar africano, todas las noches teníamos que hacerlo de esa manera. Otros no estaban muy contentos de tener que dormir en el suelo (había una gran alfombra). La gran mayoría se durmió rápidamente, mientras otros no podían lograr dormir según lo que escuche al día siguiente. Yo fui uno de los que enseguida quedó roncando”.

Por último, Laurent Lazard recordó con “Durante varias etapas estuve con mucha diarrea debido a una intoxicación. En una de las etapas tuve que parar varias veces, cinco, para ir al baño... A la llegada varios pilotos me preguntaban qué me sucedía ya que los pasaba y luego veían la moto al costado del camino solita… Nuevamente los pasaba y otra vez al rato la moto solita en el camino. Tuve que explicar cuál era la razón…”.

POR URUGUAY: ¿SOLO RUMOR?
Desde hace un año, la posibilidad de que el Dakar pase por Uruguay se maneja con insistencia. Durante la carrera de este año, los organizadores (A.S.O.) solo confirmaron dos cosas: que el Dakar 2013 sigue en Sudamérica y que finalizará –por primera vez– en la ciudad de Santiago (Chile). No negaron ni confirmaron que la carrera tenga una etapa en suelo oriental. Se sabrá a fines de febrero próximo. Se largará el 6 de enero.

“SABER EVALUAR RIESGOS”
Otro de los compatriotas que no pudo completar el Dakar 2012 fue Luis Henderson (Quad). Tras completar la tercera etapa, optó por no largar la cuarta tras mantener un cambio de ideas con los médicos de la competencia. “Un buen piloto, además de la pasión que siente al practicar este deporte, debe ser responsable y capaz de evaluar riesgos. Bueno, esto último fue lo que me tocó hacer esta vez”, explicó. El piloto compatriota recordó que lleva 12 años compitiendo en Quad y que “alguna lesión me queda…”. Luego reflexionó: “Es probable que si seguía, pudiera terminar una etapa más. Pero también si seguía, es altamente probable que hubiese sido la peor decisión de mi vida”.

ALMEIDA AL QUIRÓFANO
Mauro Almeida (Quad) abandonó en la segunda etapa del Dakar al tener una fuerte caída que le produjo lesiones severas en el hombro. Todo sucedió cuando iba detrás de otro cuadriciclo y este se tiró hacia la derecha como para dejarlo pasar. No era ese el objetivo, sino el de esquivar tres grandes zanjones. Almeida pudo sortear los dos primeros pero en el tercero le desacomodó el cuadriciclo, lo tiró, cayendo sobre el brazo. “Fue una gran desilusión debido a que me tenía mucha fe por toda la preparación que hice durante un año. Tengo un cartílago roto en la parte de abajo del brazo que es el que sostiene el hombro. Me operan en febrero”. La intensión de Almeida es correr el Mundial y el próximo Dakar pero está sujeto a cómo salga de la operación.

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