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La celeste de antes

Óscar Tabárez y Diego Lugano dieron a entender que hay dirigentes que filtran información
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16 de junio de 2014 a las 19:29

Diego Lugano no tuvo pelos en la lengua. Apuntó a la cabeza de los dirigentes que acompañan a la delegación como lo culpables de las informaciones que se filtran en la prensa y que tiene perturbados a los jugadores, según se desprendió de sus palabras.

Los rumores y las noticias que se dispararon en torno a una posible lesión de rodilla generaron la bronca del capitán que en plena conferencia respondió: “Yo estuve con la rodilla con un poco de hielo, vos no tenés por qué saberlo porque capaz que ni mis compañeros me vieron. Solo compartimos la concentración jugadores y dirigentes aparte de algún funcionario de acá de Sete Lagoas que no creo que sean los informantes. Pero hay que seguir y que los códigos se mantengan en el fútbol. No es para vos la crítica eh, pero me tengo que calentar, no seas malo”. Está claro. Si la información no sale de los jugadores. La indirecta fue para los dirigentes. No hay dos lecturas.

¿Quiénes son los dirigentes?
En Sete Lagoas hay tres dirigentes de clubes además de los neutrales. Los clubistas son Freddy Varela (El Tanque Sisley), Ernesto Dehl (Cerro Largo) y Mario Bursztyn (Rentistas). Además están los neutrales Alejandro Balbi, Jorge Barrera, Roberto Pastoriza e Ignacio Alonso. Queda la sensación de que Lugano no apuntó a los neutrales.

En más de una oportunidad Varela y Dehl dijeron que se tenía una selección de primer mundo y un fútbol local pobre.

Pero no hay que ir muy lejos. Cuando la selección llegó de la Copa Confederaciones, Tabárez respondió a quienes criticaban los gastos de la celeste diciendo: “Los gastos de la selección están todos justificados y por el Complejo Celeste hay clubes que no pasaron un solo jugador”.

Las declaraciones de Lugano perturbaron a Varela, al que se lo pudo ver hablando con uno de los neutrales a viva voz e informándole los dichos del capitán.

Curiosamente, antes de que terminara la conferencia de prensa de Lugano, apareció el técnico Tabárez. Se quedó afuera. Saludó a algunos periodistas y aguardó el momento de entrar. El Maestro disparó en el mismo sentido. “El partido anterior di la formación un día antes, nadie me lo agradeció, ahora espero que nadie me reproche. Los trascendidos no son cuestión mía. Nosotros hemos elegido utilizar un sistema de entrenamientos a puertas cerradas. O alguien no lo respeta o hay alguien que pasa información”.

Entonces la calma que parecía reinar se vio sacudida. El búnker que se mandó construir en Sete Lagoas para impedir que se filtrara información fue vulnerado. A los pocos minutos todos compartieron el almuerzo. Pero nadie se dijo nada, según revelaron fuentes a El Observador.

La mayor parte de la prensa se fue de la conferencia con la plena convicción de que algo se rompió en el entorno celeste. “Parece que no cambiamos más”, dijo Lugano. Habló hasta de “códigos”.

¿Quién no recuerda aquellas viejas historias del pasado? Dirigentes que fueron impedidos de ingresar a la concentración y tuvieron que alquilar otro hotel en el Mundial de 1990. Los problemas vividos en la Copa América de 2004 cuando los jugadores se revelaron contra el presidente de la AUF, Eugenio Figueredo, y amenazaron incluso con abandonar el hotel de Chiclayo. O el vuelo contratado por algunos jugadores para salir de Venezuela luego de perder el partido por el tercer puesto de la Copa América 2007 dejando a los dirigentes en evidencia.

Aquellos viejos pleitos parecían formar parte del pasado. Después de encarrilar el barco. Luego de poner la casa en orden y armar una estructura sólida. De manejarse con profesionalismo y sin privilegios para nadie. Tabárez ve sacudida la interna de la selección por algo que escapa de sus manos y que molestó a los jugadores. Otra vez envueltos en una polémica.

Neutrales sorprendidos
Luego de las declaraciones de Diego Lugano, El Observador consultó a los neutrales para conocer la opinión en torno a las expresiones del capitán.

Barrera expresó que “Puedo asegurar que con los cinco representantes del Ejecutivo hay una relación espectacular. Yo no siquiera fui al entrenamiento porque me quedé con el tema de Maxi Pereira. Cuando volví fue Freddy Varela el que me informó lo que dijo Lugano”.

Por su parte Alejandro Balbi comentó a El Observador que: “la interpretación de las declaraciones de Lugano no se condicen con la realidad. Los hechos me demuestran que no es así, acá está todo bien”.

Balbi agregó que: “Se habla con los jugadores, se compartió un asado, estamos jugando al ping pong, al pool, en un ambiente notable. Acá no hay inconvenientes, descartalo por completo porque estos jugadores son súmamente profesionales y correctos”.

El hecho es que los jugadores están molestos. Lugano fue claro. Habló sin pelos en la lengua. Tabárez fue en el mismo camino pero fue más diplomático. En la interna saben que la información se filtra desde adentro.

Luis Suárez molesto con un fotógrafo

Suárez se molestó ayer con un periodista al retirarse de la sala de prensa. Cuando un fotógrafo le tomaba una foto lo reconoció y le dijo: “Y la próxima vez un poquito de respeto a mi casa y te lo digo bien clarito”. El salteño está molesto con quienes lo fotografiaron y filmaron ingresando a su casa luego de su operación.

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