Si hay alguien polémico en el tenis actual, ese es
Nick Kyrgios. El joven australiano, a quien enfrentará
Pablo Cuevas en segunda ronda del Australian Open, tuvo varios episodios durante la temporada pasada. Discusiones con los jueces, rivales y hasta un golpe bajo al suizo Satanislas Wawrinka, a quien en el medio de un partido le dijo que su novia se acostaba con uno compatriota suyo, Thanasi Kokkinakis.
"Kokkinakis se acostó con tu novia, siento decírtelo, colega", le dijo Kyrgios a Wawrinka durante el Masters 1000 de Montreal, en agosto. La apuntada era Donna Vekic, de 19 años, pareja del actual campeón de Roland Garros, y también tenista, que jugó dobles mixtos con Kokkinakis.
Ese incidente le valió una sanción por un mes "en suspenso", pendiente de si vuelve a cometer incidentes graves.
Kyrgios, 30° ATP y una de las mayores promesas del tenis australiano en la era post-Lleyton Hewitt, también ha trascendido por actuar siestas en los descansos, innecesarios golpes por debajo de las piernas y un escueto "bien hecho, muchacho" a su verdugo, el británico
Andy Murray, a quien felicitó sin mirarlo al concluir el partido.
"Las payasadas de Kyrgios son graciosas", dijo el tercer favorito en rueda de prensa, donde definió a su primer oponente en Nueva York como un tenista "especial" e "impredecible", dos condiciones que convirtieron el enfrentamiento en una "trampa".
En otros momentos Kyrgios también se ha destacado por sus polémicas con el público. "¿Qué demonios hacen dejando que la gente entre en medio de un juego? Quince iguales y dejan que entren treinta personas", se quejó al juez de silla durante un partido del US Open.
También, el año pasado amenazó con dejar un partido en Wimbledon molesto con una decisión del juez.
Por todo eso, a pesar de ser el 30° se ha convertido en el tenista más popular entre los australianos, por lo que Cuevas tendrá todo el estadio en contra en el partido de segunda ronda.