Gran clima, pero no meteorológico

Rivera estuvo de fiesta en los días previos a la reapertura del autódromo Eduardo Prudencio Cabrera.

Luego de dos décadas de abandono, la pista enclavada en el parque Gran Bretaña, aledaño a la capital departamental, fue remodelada y ampliada en su extensión.

El clima en lo previo era de fiesta para los habitantes del departamento fronterizo, con varios miles de entradas vendidas de forma anticipada.

El mismo clima reinaba entre directivos y pilotos de la Asociación Uruguaya de Volantes, club organizador de los Campeonatos Nacionales de Velocidad en pista, que se acercaron a Rivera para participar con sus principales categorías en la fecha de reapertura.

Con gran esfuerzo se terminaron de ultimar los preparativos, ajustando todos los detalles al alcance de la organización, con excepción de uno que no era gestionable: el estado del tiempo.

Intensas lluvias y fuertes vientos azotaron las inmediaciones del autódromo el pasado fin de semana, que obligaron a los comisarios deportivos a decretar la suspensión de las carreras finales previstas para el domingo.

Al momento del cierre de esta edición estaba prácticamente confirmada la realización de las carreras el próximo domingo, aunque restaban ultimar algunos detalles.

Posiblemente a las categorías Superturismo, Superescarabajos, Turismo Libre y Mercedes Benz Premium Race se les sume la monomarca Chevrolet Sonic Racing Cup.

La fiesta se posterga, pero no se suspende. El buen clima que se generó en Rivera así lo amerita.