Estuvo preso, salió a robar, vendió cobre y hoy es candidato al arco de Peñarol

¿Pero quién es verdaderamente este golero apodado el Loco y que figura en la lista de candidatos a ocupar el arco de Peñarol?

Migliore se inició en Huracán, pasó por Boca, tuvo un fugaz pasaje por Racing, luego San Lorenzo hasta que lo detuvieron y emigró a Croacia. A su regreso recaló en Argentinos Juniors.
Su vida fue dura. Por eso está templado. Y el lado que más seduce a Peñarol para contratarlo es su personalidad. ¿Quiere argumentos?

En una entrevista con El Gráfico, Migliore, a quien apodan justamente el Loco, reveló haber robado una remisería. Cortó pasto, podó árboles, y fue recoletor de botellas.
“Una sola vez robé, pero era un arma de juguete, bah, no sé si era de juguete, porque yo no la llevaba. Me pusieron afuera, de campana. Era una remisería. Salimos en un auto que después chocó, y cada uno se fue corriendo para un lado distinto. La plata la repartieron a la noche”, dijo a El Gráfico.

Migliore se crió en un club de fútbol, es que su padre era canchero. “Eramos humildes, no sobraba nada: seis hermanos. Y encima mis viejos se separaron cuando tenía 4 años. Se comía lo que había. Lo más cercano al pollo que conocí fueron los menudos; y lo más cercano al asado, la falda”, revivió sus comienzos.

Debido a las necesidades desfiló por varios trabajos. “Una vez, una señora tenía un terreno enorme con yuyos altísimos, se lo limpiamos todo y en el fondo encontramos una rueda gigante de cables. Le propusimos que nos pagara con eso y ahí descubrimos el negocio del cobre. Estuvimos toda la noche quemando cables para rescatar el cobre”.

Un eterno provocador

Alguna vez un abogado lo definió como “un provocador profesional”. Uno de los últimos episodios en los que estuvo involucrado fue previo a un partido contra River en el Monumental en los primeros días de diciembre del año pasado. Migliore disparó en su cuenta de twitter: “Me dicen que temperatura hace ?? Xq me parece que hoy hace un frio monumental !!!!”, y acompaña la frase con una foto en la concentración absolutamente abrigado y con gorro estilo boliviano. Se podrán imaginar cuando llegó al Monumental…

Pero lejos de achicarse, redobló la apuesta. Cuando fue a ocupar el arco repitió el gesto que indica que tenía frío. Llovieron los insultos desde todos los sectores. Y surgieron dos cantos: “El que no salta es un botón” y otro peor relacionado con el episodio que lo tuvo encarcelado.

¿Qué hizo el Loco Migliore? En el segundo tiempo volvió a llevarse las manos al pecho. Pero el tema fue ¡lo que atajó esa tarde!

Su personalidad

A varios dirigentes de Peñarol, entre ellos Ricardo Rachetti, les seduce su personalidad. Consideran que no le pesa camiseta. Reveló que no tolera cuando lo vienen a chocar o cuando algún delantero se hace el vivo. “Cuando se me sale la cadena, se me sale. Yo hago mi partido y no jodo a nadie, entonces si me venís a chocar, o en un off side sabés que ya pararon la jugada, te quedás con la pelota y cuando me acerco la tocás a otro lado despacito, bueno, ahí se me puede salir la cadena”.
Y narró una curiosa situación en un partido contra Tigre: “Lázzaro me metió un codazo. Cuando me levanté, le dije al árbitro: ‘Echame porque lo mato a trompadas ahora, me importa todo tres carajos, echame por favor’. Ya me estaba sacando los guantes. El árbitro no entendía nada. Al final, me calmó”.

Dice que en los balones aéreos. “Soy medio lanzado en ese sentido. Yo voy a buscar la pelota y correte, no me importa nada”. Migliore reveló que una vez le dijeron ‘No sos un arquero serio para ir a la Selección’. “¿Y qué? ¿Voy a salir a jugar de traje y corbata para que me citen? Si lo que importa acá es lo que yo rindo en el arco, no lo que parezca”.

Su relación con la barra

A Migliore se lo vinculó en un encubrimiento de un homicidio y fue a la cárcel. Jamás ocultó su relación de amistad con barrasbravas de Boca. En Argentina dicen que fue barra de la 12. Él se ataja diciendo: “No, para nada, ¿o todos los que van a la segunda bandeja son de la barra? Nunca me llevé un peso de ahí ni me peleé contra otra barra. Me gustaba ubicarme detrás de los bombos, me encanta el tema de la percusión”. Su hermano, Fernando recibió un balazo concurriendo a la barra.

La relación del golero con las barras viene desde sus inicios. Una vez lo apretó la de Huracán, club en el que se inició: “Después de perder con Chicago vinieron a apretar mal, mostraron los revólveres. Me les planté, porque si estás nervioso y querés hablar, todo bien, pero si me mostrás la pistola es otra cosa. ‘Los fierros y las puntas usalos contra otra barra, no con tus jugadores, yo acá vengo a laburar’, les dije. Fue la apretada más jodida”, admitió.

Amante del boxeo, se instaló un gimnasio que pinto de amarillo y negro, los colores de Almirante Brown. En 2008 sufrió un accidente automovilístico mientras conducía por la autopista Dellepiane. Terminó gravemente herido. Luego de jugar en Croacia volvió a su país para defender a Argentinos Juniors. El Loco no anda con vueltas “ a mi me gusta que me den un pelotazo en la cara. Siento que no me podés pasar, porque estoy ahí parado y vas a chocar conmigo”.