Olimpia y Cerro Porteño, primero y segundo del torneo Clausura paraguayo, que arranca el viernes, se enfrentan en la sexta jornada en un clásico que se jugará en zona neutral, en Ciudad del Este, donde llegan con solo un punto de diferencia y con todas las entradas vendidas.
La expectación es mucha en la segunda urbe de Paraguay ante ese encuentro, que se disputa el domingo, y lo prueban que las 24.000 entradas puestas a la venta se agotaron hace tres días.
Y es que el clásico es el clásico, pero además tiene lugar con ambos rivales tempranamente posicionados para ganar el campeonato y declarando que es cosa de dos.
Olimpia llega sin haber perdido un solo partido del Clausura, aunque la semana pasada, cuando empató con Sol de América, dio señales de cierto anquilosamiento y falta de concentración.
Tendrá que salir por tanto con otra cara si quiere imponerse a un Cerro Porteño que juega como local y que ha ido de menos a más, y en el que sus brillantes individualidades, desde Jonathan Fabro hasta el recién llegado
Diego Lugano, forman parte de un bloque compacto.
Los futbolistas más representantivos de ambos clubes participaron de una campaña para cortar con la violencia. Bajo el hashtag #Hinchasdeverdad, Lugano posó con el mate y dándole la mano a un jugador de Olimpia con el tereré.