El partido clásico no contará con las nuevas medidas de seguridad

El clásico del próximo domingo entre Peñarol y Nacional no contará con las medidas nuevas de seguridad que exigió el gobierno como condición para volver a poner policías en las tribunas del Centenario y del Parque Central. Según dijo a El Observador una fuente de la AUF, se volverán a realizar pruebas piloto con algunas cámaras extra a las ya instaladas en el estadio pero ni se controlará el ingreso de personas ni se aplicará el derecho de admisión, otro de los requisitos acordados con el gobierno.

La novedad del nuevo sistema de filmación, frente al actual, es que incluirá un software que permite el reconocimiento de rostros, para luego ubicarlos dentro de una base de datos policial y así poder ejercer el derecho de admisión. Ese sistema permitiría comenzar a formular un patrón de hinchas violentos para luego excluirlos de los encuentros deportivos.

De todos modos, aplicar el derecho de admisión obligará al Parlamento a realizar algunos ajustes normativos porque las leyes no permiten llevar registros de personas salvo que hayan sido procesadas por la Justicia.

Por otra parte, la fuente de la AUF explicó que si bien la venta de entradas se realiza en las redes de cobranza con la cédula, la entrada al estadio no se controla porque si se hiciera implicaría que se generaran cuellos de botella. Entonces se opta por liberar el ingreso, afirmó.

US$ 1,5 millones
El representante de la AUF señaló que hay cuatro empresas que han ofrecido sus servicios para ser contratadas para instalar las cámaras con el software correspondiente. Una de ellas ya entregó un presupuesto. La empresa ofertó por un costo de US$ 1,5 millones que incluye las cámaras para la filmación con el software necesario, el hardware y la estuctura para el acceso al estadio, como molinetes de ingreso.

Además, esa empresa cotizó un presupuesto de US$ 212 mil para realizar el servicio de filmación de todos los partidos que restan del campeonato uruguayo.

Además, otras tres empresas ofrecieron sus servicios aunque aún no cotizaron. Entre ellas se encuentra una firma que viene realizando pruebas pilotos validados por la Asociación de Fútbol Argentina (AFA).

El estadio tiene cámaras que registran tanto el interior como el exterior, cuyo circuito es operado por el Ministerio del Interior pero no cuentan con el software que permite identificar rostros, por lo que no resultan suficientes para identificar a los hinchas violentos, como ha quedado demostrado en más de una oportunidad.

Por eso ANTEL ofreció realizar un servicio de diagnóstico de la capacidad instalada que permitirá evaluar la utilidad de los equipamiento ya en funcionamiento y qué tipo de tecnología se requiere.

La AUF evalúa si comprará el equipamiento o lo arrendará. Para eso es importante el diagnóstico que realizará ANTEL.

Estas medidas fueron decididas luego de la crisis generada por la decisión del presidente José Mujica de retirar la policía del Estadio Centenario y el Parque Central, después de los incidentes entre Nacional y Newell’s Old Boys que terminaron con policías heridos, daños en el estadio y cinco hinchas de Nacional procesados sin prisión.

En ese momento, el subsecretario del Interior, Jorge Vázquez, dijo que el propósito del sistema de cámaras es el de “ponerle nombre y apellido a quienes cometen delitos”.