El fútbol regaló una sonrisa

El fútbol profesional fue el encargado de dar una de las pocas alegrías de la jornada en los Juegos Panamericanos de Toronto, que hasta ahora vienen escasos de buenas noticias para la delegación uruguaya: fue una convincente goleada 4-0 ante Trinidad y Tobago en el arranque del Grupo B, que ambos comparten con Paraguay y México, que jugaban al cierre de esta edición.

Los dirigidos por Coito marcaron diferencias claras desde el inicio, y ya a los 5 minutos ganaban 1-0 con gol de Fabricio Formiliano. Luego ampliaron Federico Ricca a los 19' y Nicolás Albarracín a los 30', para irse al descanso 3-0 y con el partido sentenciado.

En el segundo tiempo el equipo reguló esfuerzos teniendo en cuenta el calor de Toronto, pero de todos modos pudo establecer cifras definitivas a través de Brian Lozano, que a los 65' puso el 4-0.

Uruguay formó con De Amores al arco; Suárez, Formiliano, Gorga y Ricca en defensa; Schetino, Gorriarán y Albarracín como volantes; Lozano, Santos y Arias en delantera.

Más allá de lo débil del rival, el equipo mostró buenas intenciones de tener la pelota y de buscar el arco contrario, algo que había faltado en el Mundial sub20, donde habían participado algunos de estos jugadores.

Con este resultado, el equipo uruguayo -integrado por jugadores sub 22 y con varias bajas respecto al plantel original- dio un paso importante para la clasificación, aunque con la salvedad que aún deben enfrentar a los dos rivales más fuertes de la serie: México el jueves 17 y Paraguay el martes 22.

A semifinales se clasifican los dos primeros, que se cruzarán con los dos primeros del Grupo A, que integran Brasil, Canadá, Panamá y Perú.