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El día que el fútbol faltó sin aviso
Cuando tras un partido de fútbol el comentario general es la actuación del árbitro, deja en claro que del juego en sí poco se puede comentar.
Es verdad que el arbitraje de Daniel Fedorczuk fue pobre, que debió expulsar ya no con doble amonestación sino con roja directa a Nicolás Olivera por una tremenda plancha sobre Alejandro Silva a quien lesionó y le debieron poner una bota de yeso en su tobillo derecho esguinzado, y que también debió mostrarle la roja a Sebastián Píriz por una falta sobre el propio Olivera luego de tener la amarilla a cuestas.
También es cierto que terminó el partido cuando Adrián Luna se negó a levantar un córner porque llovió desde la tribuna una petaca.
Allí quizás no estuvo tan errado. Había dado 3 minutos de adición y el tiempo había expirado. El delantero violeta fue con displicencia a tomar contacto con la pelota y tras su gesto por el proyectil, y cuando iban 10 segundos pasados los 3 minutos de adición, Fedorczuk no le dio la posibilidad de hacerlo. Era una jugada de riesgo a favor del violeta que había mostrado muy poco en ofensiva.
Defensor llegaba a este encuentro dando algunas ventajas. Las ausencias de Andrés Fleurquin y Joaquín Boghossian por lesión, la de Giorgian De Arrascaeta –en gira con la selección– y el retorno de Andrés Scotti luego de más de tres meses sin jugar, a lo que hay que sumarle que Felipe Gedoz y Matías Malvino se fueron hace poco más de una semana. Es demasiado.
Peñarol, en tanto, venía con viento en la camiseta, liquidando a todos sus rivales, con gran dinámica, velocidad y gol.
Pero un buen desempeño defensivo, una gran estrategia en ese sentido instaurada por Fernando Curutchet, lo frenó de golpe, como si aplicara el principio de inercia. No lo dejó descargar por los costados con un gran trabajo de sus internos –sobre todo, Mauro Arambarri– y el equipo de Fossati se perdió.
Claro que no es fácil –para ninguno de los dos– tratar de crear en un partido tan friccionado en el que hubo 47 faltas. Una locura.
Desde el punto de vista táctico-defensivo, lo de los violetas dio sus frutos, pero quedó clarísimo que le cuesta una enormidad llegar en profundidad en ataque y eso lo tendrán que mejorar.
La única jugada de riesgo fue al principio. Un muy buen tiro libre de Luna fue atajado notablemente por Migliore.
Peñarol, en cambio, tuvo a Sebastián Píriz como un pistón en el medio. Además de lo que aportó en marca, apareció en tres jugadas de gol.
Aunque las más claras se vieron en el complemento. Un tanto increíble que marró Zalayeta –bajísimo en su rendimiento–, un cabezazo de Valdez que dio en el palo de Campaña –que tuvo dos intervenciones excelentes– y una media vuelta que erró en la hora Darío.
Fossati debió cambiar el fondo tras la lesión de Silva y pasó a jugar con cuatro, pero Defensor no llegaba con fluidez.
El partido se fue y los dos parecieron conformarse. El fútbol apareció en cuentagotas y ambos perdieron dos puntos importantes por incapacidad ofensiva.
DEFENSOR SP.0
Martín Campaña 6
Robert Herrera 5
Andrés Scotti 6
Ramón Arias 4
Emilio Zeballos 5
Mauro Arambarri 8
Federico Gino 6
Lucas Morales 5
Nicolás Olivera 4
Adrián Luna 5
Ignacio Risso 4
DT: F. Curutchet
PEÑAROL 0
Pablo Migliore 5
Darío Rodríguez 5
Carlos Valdez 5
Gonzalo Viera 6
Alejandro Silva 5
Sebastián Píriz 6
Diogo Silvestre 5
Antonio Pacheco 5
Jorge Rodríguez 6
Marcelo Zalayeta 4
Jonathan Rodríguez 5
DT: Jorge Fossati
CAMBIOS EN DEFENSOR SP.: 69’ Matías Alonso (4) x Risso, 77’ Brian Lozano x Olivera y 84’ Juan Carlos Amado x Morales
CAMBIOS EN PEÑAROL: 62’ Sergio Orteman (4) x Silva, 64’ Fabián Estoyanoff (4) x Jonathan Rodríguez y 72’ Marcel Novick (5) x Píriz
CANCHA: Parque Franzini
PÚBLICO: 8.000
JUEZ: D. Fedorczuk (3)
TARJETAS AMARILLAS: Herrera, Olivera y Gino (DS) y Píriz, Darío Rodríguez y Diogo Silvestre (P)
