César Gallo, delegado de Platense, expresó que el árbitro Carlos Rocca no debió meterse a interceder cuando la jueza de línea Anahí Fernández era insultada por un jugador y posteriormente agredida por un niño con piedras.
"Todo comenzó con un insulto del muchacho cuando fue echado. Así comenzó la mano. Luego una persona que estaba afuera, que era un juez (Rocca) pero no lo sabíamos porque estaba como espectador, intentó hacer algo bien pero no se tenía que haber metido porque había seguridad que interviene, o los mismos jueces que están dentro del partido le dicen al delegado que se retire a la gente", dijo Gallo en declaraciones a canal 12.
El delegado de Platense concluyó: "El juez que estaba afuera intentó sacar en una buena al chiquilín, pero el chiquilín se le paró de manos y empezaron a discutir. Ahí fue cuando otros compañeros vieron como que hubo manotazos, y ahí salió la gente de la cancha a defender al chiquilín, y los jueces abandonaron la cancha para defender al juez, cosa que no pueden hacer porque no pueden salir de la cancha".
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