De Reyes, milagros y la recompensa de Nacional

Lo que estuvo a punto de terminar como una tarde de Reyes y de milagros, por la actuación del golero de Rentistas y la buena cuota de fortuna que acompañó a los del Cerrito de la Victoria durante 94 minutos, se transformó finalmente en un merecido triunfo de Nacional, el que buscó durante todo el partido y por el que debió sufrir en exceso hasta la última pelota del partido. Recién pudo celebrar con el gol de cabeza de Juan Manuel Díaz en el quinto minuto de los seis que adicionó el árbitro en el final del partido.

Si el partido se desarrolló de esa forma fue, en buena medida, por el gran planteamiento ejecutado por el técnico Adolfo Barán (que plantó a su equipo en la cancha como para rescatar un empate), por la actitud de un grupo de hombres que multiplicó las fuerzas en el campo –al final ya no pudieron y parecían guerrereos heridos que intentaba con indisimuladas dificultades mantenerse en pie– y la dosis de suerte que debe acompañar los grandes éxitos.

Es necesario puntualizar que Nacional jugó un buen partido y debió sortear todas las dificultades que le planteó el equipo que el sábado ofició de local y que se estrenó en la temporada 2013-2014, luego de su ascenso a Primera. Sin excesos de fútbol, pero con buenas ideas, disciplina táctica, buen manejo del balón y distribución de su juego, Nacional impuso su ley en la cancha. Por las bandas, con un gran despliegue de Pablo Álvarez en el primer tiempo y de Juan Manuel Díaz en el complemento, con el sentido común que le pone al fútbol Nacho González o el talento desenfrenado de Álvaro Recoba, los tricolores generaron a lo largo del partido nueve situaciones de gol. Pese a ello, tuvieron que sufrir hasta el final para encontrar la recompensa, y soportar un gran susto cuando el golero Bava dio rebote a un remate de Marcelo Fernández a los 30’, que generó la única ocasión de los rojos.

Antes y después, Nacional tuvo momento de inspiración. A los 10’, una acción en la que participaron Nacho, Morro García y Porta, terminó en la primera gran tapada de Reyes. Luego, a los 41’, otra jugada protagonizada por pases precisos y profundos de Nacho, Calzada, Álvarez y el Morro, otra vez exigieron al golero, que salvó su arco. A los 51’, Nacho pisó el área, se llenó el pie de gol, hasta que la pelota llegó al cuerpo del golero, que rechazó el remate. Hasta ahí sin Recoba ni Álvaro Fernández, que ingresaron a los 58’ y multiplicaron las opciones tricolores. Un remate desde afuera de Recoba, un centro del Chino que el Morro cabeceó afuera, un disparo de De los Santos y un tiro libre del Chino que pegó en el travesaño. Al final, cuando el fútbol de Nacional ya no lucía con el orden del comienzo, pero tenía la voluntad de fierro de esos equipos que no quieren perder, en la última pelota del partido, con todo el equipo haciendo fuerza dentro del área, Díaz cabeceó en el primer palo un córner de Recoba.

El gol de Nacional llegó en el quinto minuto de descuento. Hasta ese momento en el Estadio se pudo advertir un error del juez, porque el tanto se había convertido fuera de tiempo. El cuarto árbitro anunció que adicionaba cuatro minutos. Sin embargo, el presidente de Rentistas dijo tras el partido que los jugadores expresaron que el árbitro había advertido que iba a adicionar dos minutos más. Esa información acabó con cualquier posibilidad de alimentar la polémica.

Nacional dio señales de que pretende plasmar en el campo un juego bien desarrollado, elegante y atractivo, pero necesita reafirmar con goles sus grandes ideas, porque de nada servirán las buenas intenciones.