Pablo Cuevas perdió este jueves 3-6, 7-6(5), 4-6 contra
Rafael Nadal y quedó eliminado en los octavos de final del Masters 1000 de París-Bercy dejando una muy buena imagen.
Después de superar en su último torneo de la gira ATP una racha negra de 10 derrotas consecutivas en las que sumó nueve eliminaciones en su primer partido de nueve torneos, Cuevas recuperó en París buenas sensaciones tenísticas.
En primera ronda cortó la racha que se inició en tercera ronda de Roland Garros cuando perdió ante Fernando Verdasco. Le ganó al ruso Karen Khachanov y recuperó la confianza que perdió desde que se presentó en julio en Bastad y perdió en primera ronda con el suizo Henri Laakson, entonces número 100 del mundo (hoy 97).
En segunda ronda superó al español Albert Ramos-Viñolas con parciales de 6-7(5), 7-6(1), 6-2 en un partido clave para demostrar que el factor psicológico –tan importante en el deporte y en particular en el tenis– también se había robustecido.
Y así se presentó ante Nadal, vigente número 1 mundial. El todoterreno, el zurdo que exige con su potencia, que las defiende todas y que jamás se quiebra.
Pero Cuevas salió dispuesto a hacer un buen partido, con movilidad y golpes profundos que mantuvieron lejos de la línea de fondo a Nadal.
¿Alcanza con eso ante semejante bestia? Nunca. Por eso bastó un bajón en la intensidad del uruguayo y en la justeza de sus golpes para que Nadal lo quebrara y luego no soltara más el liderazgo del juego para llevarse cómodamente el primer parcial (6-3).
En el segundo set, el salteño aumentó su agresividad, con aces y winners que le permitieron lograr lo que no había podido en el primer set: jugar a su ritmo. Al final, su convencimiento le permitió ganar aún cuando estaba 2-4 abajo y con saque Nadal. Se repuso y se llevó el desempate 7-5.
Sin embargo, Cuevas tuvo más altibajos en el tercer y definitivo set. Ya no tuvo tanto acierto en sus golpes y bajó la intensidad, y con todo eso no pudo aprovechar el notorio bajón del español, que cometió muchos errores no forzados y se mostró afectado físicamente ya que después del segundo set solicitó atención médica y le colocaron una venda debajo de la rodilla derecha.
Cuevas también tuvo un golpe en el dedo pulgar de la mano izquierda, aunque siguió jugando con normalidad.
Estando 2-0 abajo, Cuevas quebró y se acercó (2-3), pero Nadal apretó el acelerador para llevarse el partido.
Así cerró su temporada mundial. Cambiando imagen y pisada. Desde el lunes se lo podrá disfrutar en el Uruguay Open.
Las cifras
11 aces conectó Cuevas contra solo tres de Nadal que cometió siete doble faltas por una del uruguayo.
54% de acierto tuvo Cuevas en el primer saque contra 65% de Nadal. De ese primer servicio, el salteño ganó el 70% de los puntos y Nadal el 72%. Ahí estuvo la diferencia del partido.
60% de puntos ganados con el segundo saque tuvo Cuevas contra 56% de Nadal.
6 break points salvó Cuevas de las 10 oportunidades que dispuso Nadal que por su parte salvó tres de cinco bolas de quiebre. Ambos empataron porcentualmente en el rubro con una eficacia de 60%.
La frase
"Ha sido un partido muy difícil, Pablo es muy buen jugador. Obviamente mi rodilla no está al 100%, voy a jugar en Londres si nada ocurre. Es en una semana y media, cualquier cosa puede pasar en una semana y media, pero si no ocurre nada extraño voy a estar ahí, por supuesto", Rafael Nadal
Otros resultados de la jornada
Fernando Verdasco le ganó a Dominic Thiem 6-4, 6-4
John Isner a Grigor Dimitrov 7-6(10), 5-7, 7-6(3)
Julien Benneteau a David Goffin 6-3, 6-3
Juan Martín Del Potro a Robin Haase 7-5, 6-4
Jack Sock a Lucas Pouille 7-6(6), 6-3
Filip Krajinovic a Nicolas Mahut 6-2, 3-6, 6-1
Cuartos de final
Filip Krajinovic-Rafael Nadal/Pablo Cuevas
Juan Martín Del Potro-John Isner
Julien Benneteau-Roberto Bautista-Agut/Marin Cilic
Fernando Verdasco-Jack Sock