Desde el momento en que Gustavo Díaz anunció su postura de poner el cargo a disposición de los dirigentes de Nacional se inició la ronda de especulaciones respecto al dinero que debería pagarle el club por terminar con su contrato.
En primera instancia se manejó que Díaz no renunció, sino que puso el cargo a disposición, para no perder los US$ 300 mil que le correspondn cobrar si le rescinden el contrato.
Es que Díaz firmó un contrato por un año con los tricolores debido a que fue contratado por la directiva anterior, presidida por Ricardo Alarcón.
El entrenador percibe un salario de US$ 50 mil mensuales.
En las últimas horas trascendió que Díaz comunicó al presidente Eduardo Ache que tome la medida que tenga que tomar porque su intención no pasa por reclamar el dinero si rompen el acuerdo.
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