Peñarol y Nacional no tendrán el famoso cuadrangular de pretemporada que se anunciaba con la presencia de Deportivo La Coruña y Celta de Vigo, ya que la negativa del gobierno de no variar la decisión de que la Policía no ingrese a las canchas en partidos de alto riesgo fue el golpe de gracia para dejar el fútbol en los escritorios.
Las situación se da en el medio de una crisis entre el fútbol y la
AUF por la
seguridad en las canchas. El jueves, el Ejecutivo de la Asociación decidió endurecer su postura y plantear al gobierno que si no comenzará el
Campeonato Uruguayo Especial si no hay policías dentro de los estadios en los partidos considerados de alto riesgo.
Tras los incidentes entre la hinchada de Nacional y la seguridad privada en el amistoso ante Canelones, el martes, y tras la invasión de parciales por la final del Campeonato Uruguayo entre Peñarol y Plaza, el clima levantó aún más temperatura.
"Para mí no es conveniente jugar el clásico. Me dijo el presidente de Nacional una buena idea, que ambos juguemos ante Celta y Deportivo en nuestros estadios", dijo el presidente de Peñarol Juan Pedro Damiani ayer en el lanzamiento de la firma Nissan como sponsor de ambos grandes.
Por su parte, el presidente de Nacional José Luis Rodríguez dijo: "Si se va a jugar tiene que ser con todas las garantías. Nacional va a jugar el clásico si están dadas todas las medidas de seguridad para jugar. Hay que definirlo porque los cuadros españoles no pueden demorar mucho más su viaje".
Hay conversaciones entre los clubes, el Ministerio del Interior, la empresa Tenfield y la Embajada de España para poder llegar a una solución que evite el papelón.