El portugués Cristiano Ronaldo falló un penal al intentar “picar” la pelota frente al golero de Copenhague, quien logró desviar el balón con una de sus manos, en el encuentro de este martes por Liga de Campeones que terminó 2-0 para Real Madrid.
Pese al penal errado, el delantero se convirtió, con el segundo tanto marcado por los merengues, en el máximo goleador en solitario en una fase de la Liga de Campeones, con un total nueve tantos.
El jugador portugués estaba empatado a ocho goles con Zlatan Ibrahimovic, Ruud van Nistelrooy, Filippo Inzhagi y Hernán Crespo.
Ronaldo no tuvo sin embargo una noche inspirada: falló el penal en el último minuto, mandó un tiro al palo y erró varias ocasiones claras que podrían haber aumentado su cifra goleadora.
El triunfo del Madrid, el primero que logra un equipo en el Parken en fase de grupos, es además el primero de Ronaldo en este estadio, en el que no había ganado en sus tres visitas anteriores, con Manchester United y con la selección portuguesa.
Con los tantos de Modric y Ronaldo el Madrid, que ha marcado en 31 partidos seguidos en este torneo, suma 800 goles en la competición, contando también la antigua Copa de Europa. E iguala con veinte tantos el récord en una fase de grupos que tenían Manchester United (1998-99) y Barcelona (2011-12).
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