Poco después de la hora 14 local de ayer el ómnibus que trasladó a la delegación de Uruguay desde Cardiff a Londres ingresó al aeropuerto de Heathrow para recorrer los últimos metros en tierras olímpicas.
El frustrado sueño olímpico había llegado a su fin; por esa razón, con nostalgia y dolor, los jugadores debían retornar a Montevideo. El deseo de alcanzar el último partido del campeonato, la ilusión de subir a un podio, la esperanza de jugar buen fútbol, todo se fue apagando a medida que avanzó la participación de los celestes en el grupo A y el recorrido por Londres 2012 pasó a ser parte de la historia. De una historia que se llevaron con dolor y orgullo.
“Fue muy difícil ingresar al vestuario después de la derrota ante Gran Bretaña, porque habíamos llegado a Londres con la ilusión de estar en las instancias finales. Sabíamos que ese era el último momento para nosotros en los Juegos Olímpicos, y no era el que habíamos imaginado. Pero estábamos muy tranquilos y nos pudimos mirar a los ojos porque en la cancha dejamos todo lo que teníamos. Probablemente no jugamos en la forma en que se necesitaba para ganar, pero dejamos todo”, explicó Matías Aguirregaray a El Observador, ya recuperado del golpe que significó la prematura eliminación de los Juegos Olímpicos y unos instantes antes de abordar el vuelo de Iberia con destino a Madrid, primera escala de los celestes.
Cuando el miércoles de noche el plantel retornó al vestuario del estadio Millenium de Cardiff, después de la derrota y la eliminación, el silencio se apoderó del lugar. Inmediatamente los mayores lanzaron los primeros gritos de reconocimiento al esfuerzo. “No hubo ningún reproche porque dejamos todo, y nos pudimos mirar a los ojos”, agregó Aguirregaray.
Con lágrimas en los ojos de algunos futbolistas, principalmente el capitán Luis Suárez; con la bronca a flor de labios, Tabárez se paró frente al grupo, como tantas veces en los últimos 45 días y les hizo caricias.
“Nos dijo que estaba conforme con el trabajo que hicimos, destacó nuestro esfuerzo y lo que metimos. Ese fue el momento más emocionante”, confesó el exfutbolista de Peñarol a El Observador.
De allí al hotel, a descansar, aunque a la mayoría le costó conciliar el sueño y ayer de mañana en ómnibus los futbolistas fueron trasladados de Cardiff a Londres. A la hora 19.35 local embarcaron en dos grupos hacia Montevideo, a la que arribarán el jueves a las 9.35 y 10.15, debido a que unos llegan directo a Carrasco y otros con previa escala en Buenos Aires.
Tras la vuelta a Montevideo los jugadores retornarán a sus equipos. Los únicos que no regresaron fueron Luis Suárez y Sebastián Coates, que se quedaron en Liverpool, Gastón Ramírez y Edinson Cavani, que viajaron a Italia, y Nicolás Lodeiro, que se trasladó a Holanda.
El técnico Tabárez y sus colaboradores estarán en 10 días de regreso a Europa, porque el miércoles 15 la selección mayor jugará ante Francia un partido amistosos en Le Havre.
Inicio de sesión
¿Todavía no tenés cuenta? Registrate ahora.
Para continuar con tu compra,
es necesario loguearse.
o iniciá sesión con tu cuenta de:
Disfrutá El Observador. Accedé a noticias desde cualquier dispositivo y recibí titulares por e-mail según los intereses que elijas.
Crear Cuenta
¿Ya tenés una cuenta? Iniciá sesión.
Gracias por registrarte.
Nombre
Contenido exclusivo de
Sé parte, pasá de informarte a formar tu opinión.
Si ya sos suscriptor Member, iniciá sesión acá