Mientras la atención de la gente está centrada en el Mundial de Brasil, cuando los ojos del mundo se depositan en Luis Suárez por su pase a Barcelona y la sanción definitiva que le aplicará la FIFA, en el momento donde la goleada de Alemania eclipsó a Brasil, el fútbol uruguayo se mete en su eterna calesita: contratan jugadores, no pueden pagar los salarios, generan deudas y rascan debajo de las piedras para obtener el dinero que permita jugar.
A pocos días del inicio de la nueva temporada la Mutual Uruguaya de Futbolistas recibió una cifra récord de dos millones de dólares de reclamos que las instituciones deberán cancelar para ser autorizadas a jugar.
El club que debe más dinero es El Tanque Sisley, que tendrá que abonar una cifra de US$ 409.700, según se informa en la web de la gremial de jugadores.
El total de dinero reclamado al 2 de julio es de U$S 2.213.706.
Las deudas
El Tanque Sisley US$ 409.700
Nacional US$ 331.114
Bella Vista US$ 329.568
Peñarol US$ 147.272
Progreso US$ 90.769
Danubio US$ 73.466
Miramar Misiones US$ 71.768
Central Español US$ 70.849
Cerro Largo US$ 64.201
Juventud de Las Piedras US$ 44.000
Cerro US$ 34.272
Rampla Juniors US$ 31.959
Canadian US$ 26.344
Fénix US$ 1.956
Cerrito US$ 1.651
Momento crucial
En la Asociación Uruguaya de Fútbol se viven instancias complejas. El 31 de julio culmina el mandato de Wilmar Valdez al frente del referido organismo.
Mientras el técnico de la selección Oscar Tabárez espera sin contrato por su futuro, se larga la carrera por la presidencia de la Asociación con candidatos que salieron a la arena política, dirigentes que iniciaron movimientos, y clubes que respaldan al actual presidente.
Eduardo Abulafia salió al ruedo dispuesto a cumplir su sueño de sentarse en el sillón presidencial. Arturo Del Campo es apuntalado por Danubio. Un grupo de clubes vota por la continuidad de Wilmar Valdez. Y los grandes presionando por la continuidad de sus miembros en el Ejecutivo, conforman el mapa político de la AUF a poco más de 20 días para la elección de nuevas autoridades.
Dos temas pesados
Mientras los dirigentes se pelean por los votos y buscan fórmulas de acuerdo para tener representantes en el futuro gobierno, Oscar Washington Tabárez espera por su futuro en la selección uruguaya.
El nuevo Ejecutivo deberá resolver sobre el futuro del entrenador. Tabárez aclaró que está dispuesto a seguir pero bajo determinadas condiciones. Quiere un proyecto serio. Es que, desde que asumió en 2006, vio desfilar dirigentes de todo tipo y nivel.
El otro tema pesado que tendrán en sus manos las nuevas autoridades será la venta de los derechos de televisión de las eliminatorias de Rusia 2018. Un negocio que es mirado con lupa y por el cual se exige cristalinidad.
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