Campeón de la conducción

Löw, de 55 años, finalizaba su contrato tras la Eurocopa de Francia-2016, fecha en la que anunció su alejamiento, pero con esta nueva renovación, mantendrá el cargo hasta el próximo Mundial, lo que revitaliza las chances de mantener el título.

“Dije que si con el corazón y la cabeza. Nos sentimos bien y tenemos los mismos objetivos. Hemos sido campeones del mundo y queremos volver a vivir esa sensación”, declaró Löw.

Con la firma estampada en el contrato, Löw podrá aspirar a alcanzar a Vittorio Pozzi, el seleccionador italiano que ostenta el galardón de ser el único entrenador con dos Copas del Mundo (1934 y 1938).

“El objetivo común es seguir en la cima del fútbol mundial, y vamos a hacer todo lo posible para que ocurra”, insistió el presidente de la DFB, Wolfgang Niersbach.

En octubre de 2013, Joachim Löw prolongó su contrato con la Mannschaft hasta 2016.
Después del triunfo en Maracaná ante Argentina (1-0 en la alargue con gol de Mario Götze), confirmó que seguiría seguro en su puesto hasta la Eurocopa-2016.

Löw lleva en la selección de Alemania desde 2004 y completará 14 años en el cargo una vez finalizado el Mundial de Rusia, si bien asumió el cargo formal en 2006 luego de la salida de su jefe, Jürgen Klinsmann

Su historial de éxitos no se reduce al último Mundial, ya que antes de la final ante el equipo de Alejandro Sabella, este exjugador de la segunda división germana, llevó a la selección alemana a la final de la Eurocopa-2008 (derrota 1-0 frente a España), a la tercera plaza del Mundial-2010 y a semifinales de la Eurocopa-2012.

Una generación dorada
La generación que le tocó dirigir a Löw cuenta con grandes nombres como Philipp Lahm (ya retirado de la selección pese a su juventud luego de ganar el título en Brasil), Bastian Schweinsteiger, Thomas Müller, Manuel Neuer, Mats Hummels, André Schürrle muchos de ellos egresados de la Eliteschulen des Fußballs (Escuelas élite de fútbol), un programa integral en el que se llevan invertidos € 715 millones. Los éxitos en Alemania no son producto de la casualidad, sino que tienen una enorme inversión gubernamental.

Esas escuelas tienen varias etapas de formación que moldean a los profesionales bajo un modelo de estructura deportiva que no deja ningún detalle librado al azar.

Los jugadores ingresan siendo niños de seis años y se “gradúan” a los 21, luego de cumplidas siete etapas en las que se evalúan parámetros físicos, técnicos, tácticos y psicológicos.

Si se toma en cuenta el índice demográfico y el dato de que más del 8% de la población alemana se dedica a la formación, juego y desarrollo del fútbol. Ese porcentaje, en una cifra total de 81,89 millones de personas, da un resultado magnífico.

Esa mecánica de trabajo, las cifras que se manejan y los indicadores, son el respaldo ideal para un entrenador que trabaja con toda una organización deportiva que acuna.
Otra renovación clave

La de Löw no fue la única renovación ya que también extendió su vínculo, pero hasta 2020, el mánager de la selección de Alemania, Oliver Bierhoff y tendrá a su cargo la búsqueda de nuevos talentos y la dirección de una nueva academia de jugadores, donde confluirán entrenadores, médicos y psicólogos del deporte.

Ese centro se construirá en los terrenos de un antiguo hipódromo en Fráncfort y tiene una inversión prevista de € 89 millones.

La mancha en su carrera
La única sombra en la carrera de Löw es que su nombre está ligado a un caso de dopaje en los clubes Friburgo y Stuttgart, donde jugó entre 1970 y 1980.

“El dopaje no tiene sitio en el deporte, lo desapruebo completamente”, aseveró el nuevo técnico, ansioso de mirar hacia adelante.