El día tan esperado por el presidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani, y la mayor parte de sus consejeros, llegó, ya que este lunes comenzó la construcción del futuro estadio de la institución.
Después de varios años de ingentes esfuerzos por parte del club, una idea que surgió en noviembre de 2009, comenzará a verse plasmada en la realidad.
Esta mañana, en el predio de la ruta 102 y camino Mangangá, adquirido por el presidente en junio de 2012 luego de varias vicisitudes vividas y muchas negativas (el parque Roosevelt entre ellas), la empresa Saceem, que el 26 de diciembre firmó el contrato para la construcción del estadio, arrancó con las obras.
Como sucede con cualquier obra que comienza, la empresa que se encarga de la construcción realizará primero la instalación del obrador, de las oficinas, en lo que se puede llamar el desembarco oficial.
Obviamente que se llevarán máquinas niveladoras de terreno y algún camión grúa, pero se comenzará con la limpieza de la capa vegetal que rodea al terreno.
En unos 15 o 20 días recién comenzará la excavación propiamente dicha del lugar exacto en el que se emplazará el futuro estadio.
El movimiento de tierra llevará entre tres y cuatro meses de los 14 o 15 proyectados en un principio para la construcción total.
El costo previsto de la obra en principio es de unos US$ 40 millones.
El pasado 19 de diciembre, en un acto muy importante, se colocó la piedra fundacional y la plaza en la que aparecen impresos los pies de varias figuras que vistieron y aún lo hacen (como Antonio Pacheco) la casaca mirasol.
Para Peñarol este lunes es el día del estadio. Un sueño que comienza a ser realidad.
EL PROCESO QUE DERIVÓ EN LA CONSTRUCCIÓN DEL FUTURO ESTADIO CARBONERO
2010
ABRIL
Así comenzó.
Tras varios encuentros y estudios realizados, en una reunión se presenta el proyecto ante el Ministerio de Turismo y Deporte.
JUNIO
Primera negativa.
Luego de que se pidiera el predio de Coraceros, el Ministerio del Interior contesta negativamente a Peñarol.
JULIO
Reunión con Carámbula.
Tras el primer “no”, los aurinegros continuaron buscando opciones para construir su estadio. Surgió el nombre del Parque Roosevelt. Ese mes se reunieron con el intendente canario para demostrar el interés que existía.
SETIEMBRE
Interés ministerial.
Con el correr del tiempo y sin mayores novedades, el Ministerio de Turismo y Deporte declara al futuro estadio mirasol de “interés ministerial”.
2011
ABRIL
Presentan proyecto.
Tras un llamado a propuestas para construir en el Parque Roosevelt, Peñarol se presenta formalmente.
JULIO
Canelones contesta.
Son seleccionados nueve proyectos por la intendencia; entre ellos estaba el futuro estadio de Peñarol.
2012
FEBRERO
Cambio de lugar.
La intendencia de Canelones varía –en el propio parque Roosevelt– el sitio en el que estaría el estadio mirasol. Era un cambio radical para lo que se había fijado previamente.
ABRIL
Adiós al Roosevelt.
Luego de tener tres lugares diferentes dentro del Parque Roosevelt y de un pormenorizado informe que había sido favorable a los aurinegros, la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica (Dinacia) emite un informe negativo a la propuesta debido a que el último predio previsto estaba cerca del Aeropuerto de Carrasco. Un informe anterior lo avalaba, pero la Dinacia le bajó el pulgar.
JUNIO
Compran los terrenos.
Damiani decide reservar un terreno en Montevideo en la Ruta 102 (es rural). Por entonces todo queda a estudio de la Intendencia capitalina.
AGOSTO
El “sí” de la Junta Departamental.
La Junta Departamental de Montevideo vota unánimemente que se cambie la categorización de los terrenos.
SETIEMBRE
Se presenta la idea.
En su cumpleaños 121, el 28 de setiembre, Peñarol presenta formalmente el proyecto con la presencia del presidente de la AUF, Sebastián Bauzá, la ministra de Turismo y Deporte, Liliam Kechichián, la intendenta de Montevideo, Ana Olivera y la presidenta de ANTEL, Carolina Cosse.
OCTUBRE
Comienza la venta de butacas.
El ritmo de venta no fue el mejor, más allá de que se colocaron cerca de 800 en pocos días.
NOVIEMBRE
Venta de palcos.
En una hora se colocan todos por unos US$ 8 millones.
2013
ABRIL
Préstamo del BROU.
Peñarol pide un préstamo al BROU por US$ 25 millones. El banco pretende revisar las garantías.
JUNIO
La Representativa.
La Representativa aurinegra aprueba la construcción del estadio, pero con reparos a las exigencias del BROU. Solo acepta un 10% del flujo de caja.
AGOSTO
Tenfield da US$ 7 millones.
Peñarol le vende a Tenfield el esponsoreo del futuro estadio. A su vez, se reúnen con Juan Salgado, presidente de Cutcsa, para tratar de desviar las líneas de ómnibus los días de partido, a lo que accede sin problemas.
SETIEMBRE
El “sí” del BROU.
Peñarol recibe la buena nueva: el BROU acepta dar el préstamo.
OCTUBRE
La aprobación del consejo y de la Representativa.
El consejo directivo de Peñarol aprueba la convocatoria a la Representativa y esta decide darle el “sí” al financiamiento del BROU. A su vez, la Intendencia autoriza el proyecto del futuro estadio.
DICIEMBRE
Se coloca la piedra fundacional.
Ante la presencia de autoridades y viejas glorias de Peñarol, se coloca la piedra fundacional, en tanto se anuncia la aprobación del inicio de las obras por parte de la Intendencia. Un día después de Navidad, Damiani y Alejandro Ruibal, de la empresa constructora Saceem, firman el contrato de construcción del estadio en las oficinas de la consultora CPA Ferrere.
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